miércoles, 12 de julio de 2023

SAULO DE CÓRDOBA

 

SAULO DE CÓRDOBA

Saulo de Córdoba. ?, p. s. IX – ¿861? Obispo de Córdoba.

En el año 850, a pesar de ciertas reticencias iniciales del emir ‘Abd al-Raḥmān II, Saulo fue nombrado sucesor de Recafredo como obispo de la Córdoba mozárabe sometida a la autoridad musulmana y mantuvo la condición episcopal hasta el año 861. En los años anteriores Saulo se había erigido en uno de los más pertinaces defensores de los martirios voluntarios que realizaba cierto sector de la mozarabía cordobesa y aun después de ser nombrado obispo perseveró en su postura. Tal militancia le llegó a suponer incluso el encarcelamiento temporal junto con Eulogio y otros religiosos en 851. Al año siguiente logró obtener del concilio celebrado para tratar la cuestión de los martirios un decreto confuso y ambiguo que no resultaba contrario a sus intereses.

Pocos años después, aunque la fecha exacta es incierta, estalló entre Saulo y Álbaro de Córdoba una encendida polémica, cuyos detalles se conservan en el intercambio epistolar entre ambos (Epist. Albari Cordub. 11-13). Álbaro solicitó al obispo Saulo el envío de un sacerdote que le administrara la absolución, una vez que había superado una enfermedad que lo había expuesto a la muerte y en previsión de la cual había recibido el remedio de la penitencia. Saulo, por alguna razón poco clara, aunque quizás relacionada con una supuesta acusación de migeciano, donatista y luciferiano vertida por Álbaro, le negó la comunión, a lo que éste reaccionó con otra carta en la que le dirigía graves insultos e imputaciones tales como haber absuelto a personas excomulgadas sin la mediación de una resolución conciliar, la práctica de la simonía, el nombramiento irregular de obispos y la adjudicación de una misma iglesia a dos sacerdotes distintos.

También se atribuye a Saulo la autoría de la epístola 10, anónima, del Epistolarium de Álbaro. Escrita probablemente durante su episcopado, Saulo justifica en ella su cambio de actitud y de opinión para amoldarse al sentir general de la Iglesia y muestra su oposición a las tesis rigoristas sobre la administración de los sacramentos sostenidas por sus adversarios.

Obras de ~: Rescriptum ad Albarum, J. Gil (ed.), Corpus Scriptorum Muzarabicorum, vol. 1, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), 1973, págs. 222-224; Epistola ad alium episcopum, J. Gil (ed.), Corpus Scriptorum Muzarabicorum, vol. 1, Madrid, CSIC, 1973, págs. 214-221.

Bibl.: M. C. Díaz y Díaz, “Saulo”, en Diccionario de Historia Eclesiástica de España, vol. 4, Madrid, CSIC, 1975, pág. 2388; G. del Cerro Calderón y J. Palacios Royán, Epistolario de Álvaro de Córdoba, Córdoba, Universidad, 1997; U. Domínguez del Val, “Saulo, obispo de Córdoba”, en Historia de la antigua literatura latina hispano-cristiana, vol. VI, Madrid, Fundación Universitaria Española, 2004, págs. 452-457.


David Paniagua Aguilar

 

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