EMPANADA ANDALUSÍ DE PESCADO

 

EMPANADA ANDALUSÍ DE PESCADO

El Al-Ándalus, la cocina era en sí misma un goce de la vida y los sentidos, un placer donde los sabores y las sensaciones se unieron en un concepto, en el que la comida es fuente de vida y salud, alimento, y la mejor forma de compartir y socializar.

Siglos después, los moriscos perpetuaron todas estas especialidades gastronómicas hasta el punto, incluso, de llegarlas a popularizar sobre los cristianos viejos. Un testimonio de la pervivencia de este legado culinario lo tenemos en la novela “La Lozana Andaluza” (1528).

 

Ingredientes

 

Para la masa:

3 Taza de harina

1/2 Sobre de levadura

1 Chorrito de aceite

½ Taza de agua

Sal al gusto

Para el relleno:

1 Pescado blanco o azul (mero, lubina, dorada. Etc.)

4 Huevos

Aceite

1 Cebolla

Mantequilla para untar

1 Yema de huevo

Leche

Sal al gusto

Pimentón Azafrán majado en agua

Cilantro verde

 

Elaboración

Precalentamos el horno a 200º.

Limpiamos el pescado, lo hacemos al vapor  o en agua y sal (y especia si deseamos), desmenuzamos su carne, y reservamos.

En una sartén, rehogamos la cebolla muy picada con un poco de aceite, hasta que quede transparente, retiramos y reservamos.

En una cazuela, mejor de barro, batimos los huevos, añadimos la cebolla rehogada y las especias. Se bate todo bien tapando la cazuela.

Para hacer la masa: En un bol, mezclamos, la sal, un pellizco de levadura, 3 tazas de harina, removemos muy bien, y añadimos un chorreón de aceite...

Después vamos echando poco a poco agua, removiendo continuamente hasta obtener una bola que no se pegue a los dedos.

Esta masa la dejamos reposar  una hora y media en un bol, tapada con un  paño húmedo.

Partimos en dos esta masa, amasamos y estiramos con u  rodillo, ambas piezas, haciendo  dos lamina, una mayor que la otra.

Para terminar en una, sobre una placa de horno forrada con papel sulfurizado y engrasada con mantequilla, ponemos la masa estirada de mayor tamaño. Rellenamos esta lámina con el preparado de pescado que teníamos reservado, de manera uniforme.

Batimos la yema con un poquito de leche.

Cubrimos este relleno con la otra lamina de masa, cuidando de pegar bien los bordes y haciéndole un orificio con u tenedor.

Con una brocha de silicona pintamos antes los bordes de las láminas de masa para sellarlas bien, y también la parte superior de la empanada.

Finalmente, metemos nuestra empanada en el horno, y horneamos durante 45 minutos aproximadamente, o hasta que la veamos de un bonito color dorado.

¡Buen provecho!