sábado, 21 de diciembre de 2024
martes, 17 de diciembre de 2024
PAVO ASADO CON CLEMENTINAS, TOMILLO Y LAUREL
PAVO
ASADO CON CLEMENTINAS, TOMILLO Y LAUREL
Este
delicioso pavo, deshuesado (ya los venden en supermercado y carnicerías) de
unos 5 K, será un éxito en su cena de Navidad. Podéis sustituir las clementinas
por mandarinas, la única diferencia es que las clementinas no tienen pepitas en
su interior y son más dulces que la mandarina-
Ingredientes
1 Pavo de 5 k deshuesado
100 gr de mantequilla
ablandada
4 Tallos grandes de apio,
cortados por la mitad
1 Cebolla grande, cortada en
juliana
4 Hojas de laurel
6 ramitas de tomillo fresco
8 Clementinas cortadas por la mitad horizontalmente
Para el relleno:
50 gr de mantequilla
4 Dientes de ajos,
machacados
25 gr de pan rallado fresco
450 gr de carne de salchicha
o carme molida a su gusto
100 gr de tomates semis ecos,
picados finamente
2 Cucharadas de perejil
fresco picada
3 Ramitas de tomillo fresco,
picadas las hojas en trozos grandes
Nuez moscada
Ralladura de 2 clementinas
Elaboración
Para el relleno calentamos
50 g de mantequilla en una sartén pequeña con el ajo, y cocinamos a fuego lento
durante 10 minutos. Incorporamos el pan rallado y dejamos enfriar fuera del
fuego.
En un bol grande, mezclamos
con las manos la carne de salchicha o la carne que halláis elegido con los
tomates semis ecos, las hierbas, la nuez moscad, la ralladura de la clementina
y las migas de mantequilla con ajo enfriadas.
Precalentamos el horno
a 180º.
Retiramos con cuidado la
piel del cuello del pavo y usamos los dedos para introducir cuidadosamente los
100 gr de mantequilla por debajo y por encima de la piel. Sazonamos el interior
de la cavidad y luego rellenamos el cuello con el relleno.
Colocamos el apio y la
cebolla en una fuente grande y espaciosa para el horno. Colocamos el pavo
relleno encima y asamos durante 30 minutos.
Bajamos el fuego a 160º con
ventilador. Cubrimos con papel de aluminio (sujetándolo bien) y asamos durante
1 hora y 40 minutos, rociándolo de vez en cuando con los jugos.
Durante los últimos 30
minutos de cocción, agregamos la hierba y las clementinas. Rociamos todo con
los jugos y vuelva a colocarlos en el
horno.
El pavo estará cocido cuando
lo veamos dorado o cuando los jugos salgan transparentes al perforar la parte más
gruesa. Dejamos reposar el pavo ligeramente cubierto con el papel de aluminio,
en un lugar cálido.
Servimos el pavo ene l una
fuente caliente con las clementinas y los demás ingredientes.
Consejos
Guardamos el jugo de la sartén
para hacer la salsa, si lo desea.
Lo normal es prepara el
relleno 2 o 3 días antes, tapamos y enfriamos en el frigorífico.
Debemos rellenar el pavo la noche
anterior y déjelo enfriar.
Sacar del frigorífico 1 hora
antes de asar...
¡Buen provecho!
lunes, 16 de diciembre de 2024
PECHUGA DE POLLO RELLENA DE CHORIZO Y MOZZARELLA
PECHUGA
DE POLLO RELLENA DE CHORIZO Y MOZZARELLA
Deliciosa
PECHUGA de pollo rellena de chorizo y mozzarella, deliciosa y exquisita al paladar. Servir caliente o fría,
con una ensalada verde o patatas fritas.
Ingredientes
4 Pechugas de pollo
100 gr de chorizo en rodajas
125 gr de mozzarella
8 Hojas de albahaca fresca
1 Huevo
50 gr de pan rallado blanco
fresco
1 Cucharada de aceite de
oliva
Elaboración
Cortamos la mozzarella en 4 trozos, batimos el huevo. Reservamos
Precalentamos el horno a
200º.
Cortamos la pechuga para
abrirla y poder rellenarla.
Cubrir las pechugas con
papel fil y pasamos un rodillo hasta aplanar las pechugas.
Colocamos sobre cada
pechuga, 3 rodajas de chorizo, una rodaja de mozzarella y 2 hojas de albahaca.
Salpimentamos las pechugas
de pollo, y doblamos las pechugas para
enrollarlas bien. Sujetamos con un palillo.
Sazonamos el huevo batido y
sumergimos cada pechuga de pollo en el huevo y después las pasamos por pan
rallado para cubrirlas bien.
Colocamos las pechugas en
pollo rellenas, en una bandeja o fuente de horno, espolvoreamos con aceite de oliva
y cocinamos en el horno durante 25-30 minutos, hasta que estén bien doradas y
cocidas, dándoles la vuelta de vez en cuando para que se doren bien por todos
lados.
¡Buen provecho!
domingo, 15 de diciembre de 2024
MÁLAGA. LA ALCAZABA
MÁLAGA. LA ALCAZABA
Málaga
alcazaba, palacios, viviendas
Texto de Alejandro Pérez Ordóñez
Fotografías de © Rafael Galán
García
Alcazaba de Málaga. Patio de la Alberca, en los Cuartos de Granada.
Málaga es una ciudad de antiguos orígenes. De fundación
como colonia fenicia (Malaka, ss.
VIII-IV a.C.), con presencia o al menos estrechos contactos comerciales
con los griegos (Mainake, ss.
VII-VI a.C.), tuvo importancia en el periodo romano (ss. III a.C.-V d.C., del que se conservan restos
importantes, como el teatro),
siendo luego ocupada por visigodos
(ss. V-VIII) e, incluso, por los bizantinos (s. VI), que tuvieron presencia en las costas
meridionales y sudorientales de la península Ibérica, antes de convertirse en
una medina andalusí (Madinat
Malaqa, ss. VIII-XV).
Alcazaba de Málaga. Acceso actual desde la Plaza de la Aduana.Alcazaba de
Málaga. Vista de la muralla con el teatro romano asentado en la ladera hacia la
calle Alcazabilla.Alcazaba de Málaga. Detalle del aparejo mixto de las murallas
y torres.
Tras la caída del Califato Omeya de Córdoba, Málaga se
escindió como taifa gobernada
por los hamudíes (1016),
antes de la llegada de los almorávides. Con posterioridad volvió a crearse
una segunda taifa malagueña,
que fue independiente durante una década a mediados del siglo XII hasta que los almohades tomaron el
control de al-Andalus. Finalmente, ya bajo el gobierno de los nazaríes granadinos, la ciudad conoció
su mayor esplendor y desarrollo, teniendo mucha importancia económica y
estratégica debido a su puerto de mar, con una gran actividad comercial. Fue
conquistada por los Reyes Católicos y se convirtió en sede episcopal, integrando en su diócesis a las poblaciones
que habían pertenecido a las coras andalusíes de Rayya y Takurunna, coincidiendo en gran medida con los límites de
la actual provincia de Málaga.
Alcazaba de Málaga. Mirador de arcos polilobulados entrelazados de la Torre
de Maldonado.Alcazaba de Málaga. Taca con decoración nazarí en yesería.Alcazaba
de Málaga. Capitel de tipo nazarí policromado.
La principal construcción andalusí que podemos
contemplar hoy en Málaga es su Alcazaba.
Ubicada sobre un cerro que domina el actual puerto y toda la zona antigua de la
ciudad que estuvo conformada por la medina amurallada y sus arrabales de Fontanalla (al norte) y al-Tabanin (al oeste), además de
las amplias vegas del Guadalmedina y el Guadalhorce hasta las estribaciones
montañosas que las rodean, data en sus construcciones más antiguas del siglo XI.
Alcazaba de MálagaAlcazaba de MálagaAlcazaba de Málaga
Presenta un recinto defensivo con doble circuito de
murallas flanqueadas por torres rectangulares distribuidas regularmente.
Durante el reinado de Yusuf I de Granada (siglo XIV) se construyó en otro cerro
colindante el castillo de
Gibralfaro (Yabal Faruh), que fue unido a la Alcazaba mediante una
larga coracha. La fábrica
general de los muros defensivos y torres de la Alcazaba malagueña presenta un
característico aparejo mixto de cajones de mampostería entre verdugadas de
ladrillo, con arcos de descarga y otros elementos, sobre todo de las puertas,
realizados también en este último material.
Alcazaba de Málaga. Acceso por el primer recinto.Alcazaba de MálagaAlcazaba
de Málaga
En estos recintos defensivos destacan algunos
elementos de interés, como la Puerta
de las Columnas, llamada así por presentar en sus jambas sendas columnas
y capiteles de mármol blanco de origen romano, sin duda reutilizadas de alguno
de los edificios antiguos de la ciudad, como puede ser el teatro que se
extiende a los pies de la ladera.
Alcazaba de MálagaAlcazaba de Málaga. Puerta de las Columnas, con material
romano reutilizado.Alcazaba de Málaga
El paso al recinto superior se realiza a través de
la Puerta de los Cuartos de
Granada, de trazado en recodo, dando acceso al área palatina de la Alcazaba.
Este conjunto residencial fue iniciado en el siglo XI bajo el reinado de Badis en la taifa zirí de
Granada, pero las obras más importantes se realizaron en el siglo XIV con los
nazaríes. Tras la puerta nos hallamos en el Patio de los Surtidores, ajardinado, con el conjunto de la Torre de Maldonado en su extremo
sur, donde aparece un conjunto de tres pórticos paralelos que dan paso a un
mirador abierto al paisaje, destacando un triple arco de herradura con dovelas
de decoración inspirada en la arquitectura califal cordobesa de Madinat
al-Zahra’, y otra doble arquería lobulada y entrelazada similar a las presentes
en la Aljafería de Zaragoza.
Alcazaba de MálagaAlcazaba de Málaga. Mirador de la Torre de Maldonado.Alcazaba
de Málaga
A continuación, accedemos al área reformada o
construida en época nazarí, que actualmente presenta diversas soluciones en
cuanto a arquerías, soportes verticales y cubiertas. Esto se debe a que fueron
reconstruidos desde los cimientos con bastantes licencias por parte de sus restauradores
durante el siglo XX, por lo que lo más interesante es fijarnos en su
disposición en planta. Los patios de los Naranjos y de la Alberca son los ejes
principales de este conjunto de palacios. En los lados más cortos de ambos
patios se disponen los salones principales con alcobas en sus extremos.
Alcazaba de Málaga. Arcos de herradura de época taifa en la Torre de
Maldonado.Alcazaba de Málaga. Arcos de herradura de época taifa en la Torre de
Maldonado.Alcazaba de Málaga. Patio de los Naranjos, en los Cuartos de Granada.
El Patio
de la Alberca presenta en su centro la lámina de agua que le da
nombre, siguiendo un modelo similar al Patio de Comares o de los Arrayanes de
la Alhambra, mientras que el Patio
de los Naranjos dispone de dos albercas pequeñas.
Alcazaba de Málaga. Patio de los Naranjos.Alcazaba de Málaga. Capitel
nazarí policromado.Alcazaba de Málaga. Cuartos de Granada.
En la parte más oriental de este último recinto se
encontraron las ruinas de un barrio
de pequeñas casas formado por tres manzanas entre calles enlosadas,
que viene datándose en la fase fundacional de la Alcazaba (siglo XI). Fue
objeto de intervención arqueológica por Leopoldo Torres Balbás, estudiado por
Rafael Puertas Tricas y Manuel Ocaña Jiménez, y restaurado por Rafael Manzano
Martos, quien reconstruyó las viviendas recreciendo los muros conservados y
dotándolas de cubiertas y acabados exteriores de los paramentos.
Alcazaba de Málaga. Arco angrelado de yesería en los Cuartos de Granada.Alcazaba
de Málaga. Detalle de arco angrelado de yesería y albanega con estrella de ocho
puntas de tracería geométrica.Alcazaba de Málaga. Cubierta con decoración
geométrica pintada.
La manzana sudoeste se conformaba por un pequeño baño
y dos viviendas muy reducidas, y la manzana más oriental está formada por otras
dos casas también de pequeño tamaño. En la manzana sur sin embargo se
encontraron tres viviendas de mayor extensión que las anteriores. La altura
máxima de los muros que se han conservado es de un metro. Todas las casas
tenían un pequeño patio casi cuadrado, con andenes y crujías alrededor. Algunas
conservan los primeros peldaños de las estrechas escaleras que conducían a la planta
superior. El suelo de las habitaciones se resolvía con una capa de mortero de
cal teñida de almagra, aunque algunas conservan losetas de barro y piezas de
mármol reaprovechadas. En el interior aparecieron zócalos pintados de rojo, con
inscripciones en cúfico y dibujos geométricos de lazo de ocho.
Alcazaba de Málaga. Arcos taifas de la Torre de Maldonado.Alcazaba de
Málaga. Vistas hacia el puerto de la ciudad.Alcazaba de Málaga. Torre de
Maldonado.
Casi todas las viviendas tenían letrinas, y el barrio contaba con un sistema de atarjeas para evacuar las aguas fecales. En la parte septentrional del barrio había un baño, al que se hacía subir el agua mediante una noria desde un pozo llamado Airón, en el recinto inferior.
Alcazaba de Málaga. Puerta en arco de
herradura apuntado con mocheta doble.
Alcazaba de Málaga. Columna y capitel
romanos reutilizados.
sábado, 14 de diciembre de 2024
CHIPIRONES CON CEBOLLA Y PIMIMIENTOS CARAMELIZADOS
CHIPIRONES
CON CEBOLLA Y PIMIENTOS CARAMELIZADOS
Esta
receta es típica en el país vasco desde
antaño. Podeemos elaborarlos tambien con calamares pequeños.
Ingredientes
24 Chipirones frescos. O calamares pequeños
3 Cebollas blancas, peladas
y cortadas en juliana
1 Pimiento verde, sin pedúnculo
y semillas, cortado en rodajas finas
2 Dientes de ajos, pelados
y laminados
50 ml de brandy
100 ml de vino blanco
1 Cucharada de perejil muy
picado
2 Cucharadas de pan rallado tostado
en horno
4 Cucharadas de aceite de oliva
Sal
Elaboración
Preparamos los calamares o chipirones,
limpiándolos muy bien su interior. Lavamos el cuerpo con agua fría del grifo.
Separamos la cabeza de los tentáculos
haciendo un corte justo debajo de los ojos (descartamos la cabeza) y sacamos el
pico por el centro de los tentáculos. Tiramos con las manos de las aletas laterales de cada calamar y
picamos finamente junto con los tentáculos.
Rellenamos cada calamar con
esta mezcla y cierra la parte superior con un palillo de madera y reservamos.
En una cacerola mediana,
calentamos 2 cucharadas de aceite de oliva y agregamos las cebolla en juliana,
el pimiento verde y los ajos, cocinamos a fuego lento durante 60 minutos, o
hasta que la mezcla este muy suave y bien caramelizada.
Nos aseguramos de seguir removiendo
la mezcla para evitar que se peguen a la cacerola y se quemen.
En una sartén mediana,
calentamos un poco de aceite y, una vez caliente, freímos los chipirones en tandas de 6, durante unos 2
minutos por cada lado o hasta que estén dorados.
Colocamos cada tanda en la mezcla
de cebolla y pimiento caramelizados. Desglasamos la sartén con un curto de
brandy y después de freír cada tanda y vertemos el jugo en la mezcla de
chipirones y cebolla.
Una vez fritos todos los
chipirones, calentamos la mezcla, vertemos el vino blanco y cocinamos a fuego
lento durante 20 minutos.
Probamos el punto de sal y
dejamos reposar los chipirones durante aproximadamente 1 hora antes de
servirlos. Esto ayudara a que los sabores se impregnen mejor en los chipirones.
Para servir, recalentamos la
mezcla de chipirones y cebolla y servimos 3 chipirones o calamares por persona
como entrante o 6 por persona como plato principal.
Espolvoreamos un poco de
perejil muy picado y pan rallado sobre los chipirones o calamares antes de
servir.
¡Buen provecho!
jueves, 21 de noviembre de 2024
SOLOMILLO DE CERDO IBÉRICO CON SALSA AL PEDRO XIMÉNEZ
SOLOMILLO
DE CERDO IBÉRICO CON SALSA AL PEDRO XIMÉNEZ
Ingredientes
1 Solomillo de cerdo ibérico
(400/500 gr aproximadamente)
2 Dientes de ajos ligeramente
machacados con piel
1 Pequeño manojo de tomillo
fresco
1 Cucharada de aceite de oliva
3 Cucharadas de mantequilla
sin sal
Sal
Pimienta negra recién molida
Para la salsa al Pedro Ximenez:
200 ml de caldo de pollo
125 ml de Jerez Pedro
Ximénez
2 Chalotas grandes, picadas
finamente
2 Ramitas de tomillo fresco,
picadas finamente
Elaboración
Precalentamos el horno a
200º.
Frotamos el solomillo de cerdo
ibérico con una cucharada de aceite de oliva, añade un poco de condimento y
luego en una sartén caliente sellamos toda la parte exterior del solomillo,
para evitar que pierda su jugo, procurando que se dore por todas partes.
Agregamos los dientes de ajos, el tomillo fresco y una cucharada de mantequilla
y vertemos la mantequilla espumosa sobre el filete de cerdo hasta que esté bien
cubierto.
Sobre una fuente
refractaria, colocamos el solomillo de cerdo ibérico y metemos en el horno, cocinando
durante 6 minutos, rociando el solomillo nuevamente con la salsa, a la mitad de la cocción. Retiramos del
horno, lo colocamos sobre una fuente o plato, el ajo, las hierbas, cubrimos con
papel de aluminio y dejamos reposar durante 5 minutos.
Para preparar la salsa Pedro
Ximénez: utilizamos la misma sartén en la que hemos cocinado el cerdo, pero
escurrimos el aceite de cocina y dejamos que la sartén se enfrie antes de
manipularla. Añadimos una cucharada de mantequilla y freímos suavemente las
chalotas picadas y el tomillo, asegurándonos de raspar toda la caramelización
del fondo de la sartén. Añadimos el Jerez
Pedro Ximénez, llevamos a ebullición y reducimos a la mitad. Añadimos el caldo
de pollo y reducimos a la mitad nuevamente, hasta que la salsa quede agradable
y espumosa.
Comprobamos el condimento y
a fuego lento, añadimos la última cucharada de mantequilla, mezclando bien
hasta que tengamos una salsa brillante. No debemos hervir la salsa después puesto
.que la mantequilla se cortaría.
Para servir, cortamos el solomillo
en medallones y colocamos en una plato caliente, vertimos la salsa Pedro Ximénez
por encima y servimos con las verduras o patatas que prefieras.
¡Buen provecho!