TEJERINGOS DE EMBUDO

TEJERINGOS DE EMBUDO

El embudo ha sido durante mucho tiempo un elemento básico en las casas y puestos callejeros,  hoy son producidos en cafeterías y con franquicias, pero no como esta receta que os pongo hoy. Solo el aroma de esa masa dulce crujiente, crujiente y perfectamente frita, cubierta con azúcar glas, es suficiente para regresar a los recuerdos de la infancia. Mi madre era una innovadora, siempre nos hacia disfrutar con sus ideas de cocina.

Los  tejeringos de embudo, se pueden preparar fácilmente en cualquier época del año en casa. La masa es simple y la fritura es rápida. Los pasteles de embudo son divertidos y están destinados a compartir. Esta receta es dulce, no es como las que comemos en la calle que no tienen azúcar, ni huevos en su composición.

Ingredientes

3 Huevos

2 Tazas de leche

4 Tazas de harina

1/3 de taza de azúcar

½ Cucharadita de sal

1 Cucharada de levadura en polvo

Aceite de oliva para freír

Azúcar glas para decorar

Elaboración

En un bol grande, mezclamos los huevos y la leche, batiéndolos bien hasta integración.

En Otro bol, mezclamos la harina, el azúcar, la sal y la levadura en polvo.

Poco a poco vamos combinado los ingredientes secos, con la mezcla de huevos y leche, batiendo siempre, hasta que forme una masa suave y estén bien integrados todos los ingredientes.

Calentamos el aceite en una sartén amplia.

El hecho de ponerle tejeringos de embudo, viene de como mi madre lo vertía la masa directamente en el aceite de freír a. través de un embudo. Si eliges este método, debes tener puesto un dedo en la boca del embudo, mientras llenas este, y luego soltar el dedo una vez que el embudo este lleno de masa y comiences a freír los tejeringos. Y darles la forma que quieras, bien en tejeringos o en varias pasadas en el mismo circulo, formando un pastel, ya a gusto de cada uno.

También lo puedes hacer con una manga pastelera o una churrera.

Para freírlos, mueva el embudo o la manga pastelera sobre el aceite caliente, comenzando en el centro de la sartén y girando la masa hacia afuera, o dándole la forma del tejeringo tradicional (redondo, terminando en lazo) yo los he elaborados como pasteles. Freímos durante 2 0 3 minutos por ambos lados, o hasta que estén dorados.

Retiramos del aceite con unas agujas de brochetas largas o una espumadera con bastantes huecos, para no llevarnos aceite.

Al sacarlos los ponemos sobre papel absorbente de cocina para que absorban el exceso de aceite, y luego poner en platos y rociar los tejeringos con azúcar glas (hay quien le rocía con nocilla).

A disfrutarlo bien calentitos.

¡Buen provecho!

Asi se preparan en Málaga los tejeringos