El principal problema a la hora de estudiar la
ciencia árabe —particularmente la Astronomía— en al-Andalus durante el siglo XV
es el reducido número de fuentes árabes disponibles. En este trabajo damos
primero un repaso a las pocas fuentes árabes que pueden sernos de utilidad
para, a continuación, plantear un eje cronológico en el que ordenamos datos
hasta ahora dispersos relativos a la astronomía de herencia árabe en occidente,
particularmente en el Magreb y España
1. GENERALIDADES
En 1232 Muhammad b. Yusuf b. Naesr es proclamado
sultán en Arjona, dando inicio así a la última de las dinastías de soberanos
musulmanes en al-Andalus. La dinastía naesri gobernaría el cada vez más
disminuido al-Andalus hasta el 2 de enero de 1492. Sobre los tres siglos de
gobierno de los Ban.
u Naesr
tenemos conocidas y destacadas aportaciones. Además de las fundamentales
contribuciones de Arié (1), contamos desde hace muy poco con los Estudios
nazaríes publicados en Granada en 1997 bajo la dirección de Concepción
Castillo Castillo. En el citado volumen se reúnen contribuciones de varios
autores relativas al derecho, la literatura, el arte, la lengua y la historia
durante los siglos XIII, XIV y XV en Granada. Varios trabajos aparecieron publicados
en 1992 en relación con el tema que nos interesa: el volumen Las ciencias de
los antiguos en al-Andalus de Julio Samsó (2) y las contribuciones de Calvo
y Castells incluidas en El legado científico andalusí (3). Los autores
de estos trabajos advertían al lector de la escasez de fuentes árabes
disponibles para comprender el panorama científico del último siglo de la
historia de al-Andalus.
Samsó nos indicaba claramente que:
«Se trata de un período largo [la etapa nazarí], de
más de dos siglos, en el que resulta fácil detectar una actividad científica,
aunque nuestros conocimientos sobre la misma se limiten a los siglos XIII y
XIV. La causa es obvia y se debe a que la obra de Ibn al-Ja.tib, su Ih.a.ta
sobre todo, domina el panorama cultural de la época y constituye la fuente
básica a la que hemos recurrido constantemente. A la muerte, en 1375, del
polígrafo granadino, nos quedamos sin guía y no sabemos casi nada de lo que
sucede en el siglo XV, si exceptuamos figuras esporádicas como la de
al-Qalaesadi»(4).
Del mismo modo nos recordaba Calvo que:
«El primer problema que se plantea al abordar el
estudio del desarrollo científico y cultural en esta época es la falta de datos
suficientes para trazar una descripción completa de lo que supuso este período
que, por otro lado, no parece haber sido muy prolífico en cuanto a logros
notables»(5).
En efecto, mientras que en los siglos XIII y XIV se
advierte aún actividad científica en al-Andalus, aunque parece que sin llegar
al nivel de la producción de las etapas almorávide y almohade, desconocemos
casi por completo lo relativo a dicha actividad durante el siglo XV. Carecemos,
quizás más por desconocimiento que por verdadera inexistencia, de fuentes
árabes sobre este siglo de la historia de al-Andalus y el Magreb. Empezaré pues
por indicar en este trabajo algunas fuentes que pueden ser útiles para
acercarse a esta época postrera, decadente en lo que a política se refiere,
pero no en cuanto a la cultura (6). Es posible que así fuera también para la
ciencia pero no podemos aventurar conjeturas sin base documental por el
momento.
Son numerosas las crónicas, repertorios biográficos y
bibliográficos, obras geográficas y obras filológicas, cuyos contenidos no han
sido sistematizados aún (7). De tal forma que algunas de estas fuentes ya han
sido analizadas para extraer datos sobre la actividad científica durante los
últimos siglos de al-Andalus pero muchas otras no. Una de las vías para
aumentar nuestro conocimiento sobre la actividad astronómica en el Magreb
durante el siglo XV será el análisis de fuentes árabes de tipo biográfico. Para
el periodo naesri los arabistas nos servimos tradicionalmente de
dos fuentes árabes de carácter biográfico fundamentales. Se trata, como es
sabido, de la I
hata fi ajbar Garnata, redactada en la segunda mitad del siglo XIV por el
polígrafo granadino Lisan al-Din b. al-Jatib (8) y el Nafh at-it min gusn
al-Andalus ar-ratib, redactada por al-Maqqari en el siglo XVII. La Iehata
es obra temprana para nuestro proyecto de reconstruir el estado científico
de herencia árabe en la España en el siglo XV. Respecto a la obra de al-Maqqari
sabemos que nos aporta principalmente valiosos datos de tipo literario,
cultural y social si bien encontramos en ella también la biografía, por
ejemplo, de un matemático como al-Qalasadi (9). Otras fuentes, hasta ahora sin
analizar con el sesgo que nos interesa, pueden ser útiles. Por ejemplo la yadwat
al-iqtibas fi dikr man halla min al-a´lam madinat Fas de Ibn al-Qadi (m. en
1205 H./1616 J.C.) (10) que contiene biografías de interés sobre andalusíes
emigrados a Fez o que pasaron un tiempo en dicha localidad. Ibn al-Qadi
recopiló las biografías de ocho personajes que cultivaron las siguientes
materias: fara.’id. (cálculo de sucesiones: 1 biografía, la nº
545), handasa (geometría teórica: 2, nº 93 y nº 297), hisab (cálculo
aritmético: 2, nº 93 y nº 545), etibb (medicina: 6, nº 11, nº 89, nº 93,
nº 544, nº 579 y nº 612). Las biografías que contiene esta obra llegan hasta el
año 1007 H./1598 J.C. y se refieren a matemáticos y médicos pero, en ninguna de
ellas, se menciona a ningún astrónomo. Algo anterior es la Durrat al-hiyal fi
asma’ ar-riyal (11), redactada por este mismo autor en 999 H./1591 J.C.
como complemento de las Wafayat al-a´yan de Ibn Jallikan. Creo que este
repertorio bibliográfico no ha sido estudiado en este sentido y puede que sea
una fuente de utilidad.
Igualmente, se deberían revisar otro tipo de fuentes
para extraer posibles datos sobre científicos andalusíes asentados en
localidades del Magreb en el siglo XV. Además de las obras de género biográfico
(tarayim) podríamos considerar también el estudio de índices o
repertorios (faharis,baramiy) y listas (atbat) que
permanecen inéditos en la mayoría de los casos. Por ejemplo los de as-Sarray
(m. en Fez en 805 H./1402 J.C.) e Isma´il b. al-Ahmar al-Garnati al-Fasi (m. en
808 H./1405 J.C.), quizás tempranos para nuestro interés. Con datos ya delsiglo
XV citaremos, entre otros, el barnamay de al-Munturi (12) (m. en Granada
en 834 H./1431 J.C.), al-Mayari (m. en 862 H./1458 J.C.) (13), Abu .Yafar Ahmad
b. ´Ali al-Balawi al-Wadi Aksi (14) (emigrado de Granada a Tremecén y Túnez en
984 H./1488 J.C.) y otros biógrafos posteriores que, según se afirma, en
general recogen las biografías de andalusíes que aparecen en fuentes anteriores,
dada la importancia que éstas tenían para el correcto establecimiento de
genealogías de ulemas, y su relación con la transmisión de la tradición
islámica (15).
Por otro lado, además del vaciado selectivo de estas
fuentes, deberemos ponderar un elemento modificador que hace que el periodo naesri
deba ser estudiado desde un punto de vista no exclusivamente andalusí debido a
la masiva emigración de andalusíes hacia distintas localidades del Norte de
África. La derrota de las Navas de Tolosa (609 H./1212 J.C.) supone la antesala
de las masivas huidas que aumentarán su frecuencia a partir del siglo XIII tras
la caída de ciudades andalusíes como Valencia o Sevilla (16). Ello nos lleva a
consultar y estudiar necesariamente, como estamos indicando, no ya fuentes
andalusíes sino fuentes magrebíes, puesto que nos quedamos sin portavoces de la
historia andalusí. Y es que como sabemos la historia de al-Andalus prosigue,
con sus particularidades y diferencias, en numerosas localidades del Magreb que
paulatinamente van recibiendo a los andalusíes huídos de un estado que se
desmorona.
Un tercer elemento entraría en juego en nuestro
análisis particular del siglo XV. Este elemento es la influencia de astrónomos
del Islam oriental en el Magreb. Tenemos datos de la existencia en el Islam
oriental de astrónomos que desarrollaron modelos distintos al ptolemaico, el
caso más conocido es el de Ibn aks-Satir. Al mismo tiempo, en zonas del Islam
oriental como Egipto y Siria abundan los casos de invención y/o mejora de instrumentos
de aplicación astronómica. Ya sabemos cosas acerca de la influencia de la
astronomía e instrumentación de origen andalusí en el Magreb y en oriente, pero
sabemos menos acerca de la influencia en sentido inverso, tanto de la mano de
orientales como de occidentales que hicieron su rihla y regresaron al
Magreb con novedades orientales.
Ante este pobre panorama documental, y a la espera de
resultados a medio plazo, hemos reunido aquí datos sobre astronomía e
instrumentación, mencionando astrónomos de desigual competencia y
conocimientos, relativos a personajes activos en la Península Ibérica y el
Magreb en el siglo XV. El estudio pormenorizado de las aportaciones de estos y
otros, hoy por hoy desconocidos personajes, y de las relaciones que entre ellos
existieron, podrá darnos en el futuro una visión más aproximada de la que debió
ser una por ahora poco conocida actividadastronómica magrebí durante la Baja
Edad Media. La necesidad de estudiar la obra conservada de astrónomos,
constructores de instrumentos o muwaqqitunde este período se hace
urgente, si queremos conocer y evaluar con rigor el legado científico de una
etapa considerada a priori decadente. Hasta ahora en algunos trabajos se
justificaba la utilidad del estudio de ciertas obras «tardías» por una
hipotética posibilidad de que aportaran datos sobre obras anteriores perdidas.
Posiblemente, dentro de un tiempo tengamos que plantearnos la importancia de
estas obras en sí mismas y no como meros vehículos de transmisión del saber del
pasado.
Si nos liberamos del fatídico 1492 y miramos un poco
más hacia adelante puede que nuestra idea de lo que para la ciencia supuso el
fin de al-Andalus cambie. ¿Y si pensamos que al-Andalus sigue vivo pero
desgranado en localidades del Magreb? Aceptada esta premisa, ¿seguirá siendo
inevitable hablar del fin de al-Andalus? Fin político y, algo más tarde, fin de
una estructura social y religiosa, sí. Pero ¿es que la actividad intelectual de
herencia árabe desapareció también con la extinción del ya minúsculo estado de
los Banu Nasr? ¿Podremos extraer nuevas conclusiones del estudio de la
emigración de sabios andalusíes al Norte de África? ¿Hubo una continuidad
alimentada por los contactos de hombres de ciencia magrebíes con el oriente
islámico? Por el momento sólo he sido capaz de elaborar el eje cronológico que
sigue a continuación. Puede que en un futuro nos podamos adentrar más
cómodamente en una época que de momento, y con razón dada la carencia de
evidencias documentales, se nos antoja agónica, decadente, estéril.
2.
EJE CRONOLÓGICO DE LA ACTIVIDAD ASTRONÓMICA DE
HERENCIA ÁRABE EN OCCIDENTE DURANTE EL SIGLO IX H./XV J.C.
En las siguientes páginas he reunido datos relativos
a la astronomía de herencia árabe bajo un único criterio, el cronológico. Es
decir, las noticias mencionadas tuvieron lugar en los últimos años del siglo
VIII H./XIV J.C. y a lo largo del siglo IX H./XV J.C. Estos datos se encuentran
dispersos en distintos trabajos inéditos y publicados ya citados, o en otros a
los que haremos alusión más adelante.
*
[795 H./1392-3 J.C.] Izz al-Din Abd al-´Aziz b. Sad
al-Din Mas´ud b. ´Izz al-Din Abd al-Aziz al-Tilimsani al-Maliki, conocido como
Ibn Farmiya, finaliza en El Cairo la redacción de la Risala k
afiyat as-sayb fi-l-camal bi-l-.yayb, un completo tratado sobre las
aplicaciones astronómicas, topográficas y aritméticas del cuadrante de senos
(17). Conocemos muy pocos detalles acerca de la biografía de este cadí del madhab
malikí que posiblemente nació en Tremecén y que ejerció las funciones de imam
ymuwaqqit en Fez, Túnez, Jerusalén y Damasco. La mayoría de estos
datos proceden de la copia de esta risala que se nos ha conservado en el
fondo árabe de El Escorial (18).
* [796 H./1394 J.C.] El mismo Izz al-Din b. Mas´ud
supervisa la realización de la copia del Tay al-azyayde Ibn Abi al-´Sukr
al-Magribi(m. 1283) en Túnez de la mano de Muzaffar b. ´Abd Allah. Este
compendio tabular era usado y bien conocido en el Magreb, tal y como ha
demostrado Samsó (19).
* [815-891 H./1412-1486 J.C.] Abu.-l-Hasan ´Ali b.
Muhammad b. ´Ali al-Basti al-Qalsadi (o al-Qalsadi). Matemático. Nacido en
Basta, actual Baza, en 1412. Fallecido en B.ajya (Túnez) en 1486 o en 1506. Es
el último científico andalusí de una cierta importancia (20). En su Rihla (21)
aparece citada una única obra sobre astronomía de la cual ignoramos su
localización y contenido. De él se conoce fundamentalmente su labor como
matemático y no existe, o no conozco, ningún estudio de su obra astronómica.
* [m. 844 H./1440 J.C.] Abu-l-Hasan ´Ali b. Musà b.
´Ubayd Allah al-Lajmi al-Qarabaqi. Fallecido durante la epidemia de peste
declarada en Granada. Fue uno de los maestros de al-Qalasadi, mencionado supra.
Desempeñó el cargo de muwaqqit probablemente en Baza lo que implica que
debía tener ciertos conocimientos astronómicos y relativos al uso de
instrumentos para determinar las horas (22)
* [ca. 850 H./1446 J.C.] Aparecen citados dos
capítulos de la risala sobre los usos del cuadrante de senos de Ibn
Mas´ud en un tratado sobre la misma cuestión escrito por Abu Ya´far ´Umar b. ´Abd
al-Rahman b. Abu-l-Qasim al-Tunisi al-Tuzari. Este autor debió consultar bien
el autógrafo de la obra de Ibn Mas´ud o bien una copia pero en cualquier caso
una copia distinta a la que se conserva en El Escorial ya que ésta data de 888
H./1483 J.C.
* [1456 J.C] Johannes Bonie, probablemente un
valenciano judío que trabajó para el rey René en Francia, traduce al valenciano
un tratado árabe, de autor hoy desconocido, sobre las aplicaciones del
cuadrante de senos (23). Un alfaquí de Paterna (Valencia), sin identificar,
había traído el tratado árabe desde El Cairo. Este texto valenciano forma parte
de lo que se conoce como tradición textual del tratado del sexagenarium y
constituye el único ejemplo conocido de tratado de usos del cuadrante de senos
en una lengua romance (24). El mismo Johannes Bonie empezó a traducir el texto
valenciano al latín, pero no concluyó la tarea.
* [1464 J.C] Johannes Bonie termina el doce de marzo
de 1464 un texto latino sobre el sexagenarium (25). El contenido de este
texto no coincide con el del texto valenciano de 1456. Este tratado de Bonie
constituye el primer tratado identificado escrito en latín sobre los usos del
cuadrante de senos. Con su descubrimiento constatamos la recepción de un
invento árabe bastante antiguo, del siglo IX J.C., en el occidente latino en el
siglo XV.
* [1475 J.C] Christianus Prolianus explica en una
obra suya sobre el astrolabio cómo usar el sexagenarium, denominación
latina aplicada al cuadrante de senos, trazado que, como el propio Prolianus
indica en su obra con acierto, podía aparecer en el dorso del astrolabio. En su
texto se advierten coincidencias con el tratado valenciano de Bonie pero no
puede hablarse de una traducción de éste. El texto de Prolianus es el segundo
ejemplo que hemos descubierto de tratado latino sobre las aplicaciones del
cuadrante de senos.
* [881 H./1476 J.C.] Muhammad b. Faray construyó un
astrolabio que se conserva actualmente en Nápoles (26).
BIBLIOGRAFÍA
[0211-9536(2001) 21; 257-267]
Fecha de aceptación: 2 de febrero de 2001
(*) Este trabajo ha sido realizado en el marco de
nuestro proyecto de investigación titulado «La actividad científica de herencia
árabe en España en el siglo XV: el caso del Sexagenarium» financiado por el
Vicerrectorado de Investigación de la Universidad de La Laguna (PI 1802220002)
y la Dirección General de Universidades e Investigación de la Consejería de
Educación, Cultura y Deportes del Gobierno de Canarias (PI 2000/133).
(**)
MARAVILLAS AGUIAR
AGUILAR es Profesora Titular de
Universidad. Departamento de Filología Clásica y Árabe. Universidad de La
Laguna. E-Mail: maguiar@ull.es
(1) Véase, entre sus numerosos trabajos:L’Espagne
musulmane au temps des Na
esrides (1232-1492), París, E. de Boccard,
1973 (reimpresión: Madrid, Mapfre, 1992). En las páginas 396-399, 410-411 y
423-438 se pueden encontrar algunos datos sobre la ciencia y la medicina de
esta época. También en sus Études sur la civilisation de l’Espagne musulmane,
Leiden, E. J. Brill, 1990, recoge ocasionalmente información de este tipo.
(2) SAMSÓ, Julio. Las ciencias de los antiguos en
al-Andalus, Madrid, Mapfre, 1992. Véase el capítulo 6 del citado volumen
titulado «Epílogo: la larga agonía de laciencia en la Granada nazarí
(1232-1492)», pp. 387-446.
(3) CALVO, Emilia. La ciencia en la Granada nazarí
(Ciencias exactas y tecnología)
y CASTELLS, Margarita. La medicina en al-Andalus.In:
El legado científico andalusí, Madrid, Ed. Ministerio de Cultura-AECI,
1992, pp. 117-126 y 139-142, respectivamente.
(4) SAMSÓ, nota 2, p. 445.
(5) CALVO, nota 4, pp. 117-119.
(6) Véase CASTILLO CASTILLO, Concepción (ed.),
Prólogo. In: Estudios nazaríes, Granada, Universidad de Granada,
1997, pp. 5-12.
(7) Véase VIGUERA MOLINS, María Jesús. La cultura
nazarí y sus registros históricos, biobliográficos y geográficos. In:
Concepción Castillo (ed.), nota 6, pp. 165-189.
(8) Véase PUIG, Roser. Dos notas sobre ciencia
hispano-árabe a fines del siglo XIII en la Ihata de Ibn al-Jatib.Al-Qantara,
1983, 4, 433-440. En este trabajo la autora comenta datos recogidos en
laIhe a. etasobre un grupo de médicos de la Granada nasri
(pp. 433-437) y sobre la biografía de un ingeniero de la época (pp. 437-440).
También PUIG, Roser. Ciencia y técnica en la Ihea. etade
Ibn al-Ja.tib. Siglos XIII-XIV. Dynamis, 1984, 4, 65-79; PUIG,
Roser. Noticias sobre ciencia y técnica en laIhata de Ibn al-Jatib,
Memoria de licenciatura inédita; SAMSÓ, nota 2, p. 401, nota 36.
(9) AL-MAQQAR
II.Nafh at tib
min gusn al-Andalus ar-ratib[ed. I. Abbas, Beirut ], 1968, vol. 2, pp. 292-294; SAMSÓ,
nota 2, p. 404.
(10) 2 vols., Rabat, 1973. Véase ROMERO, Carmen.
Emigrados andalusíes en la
LYadwat al-iqtibasde Ibn al-Qadi.In: M.
L. Ávila (ed.) Estudios onomástico-biográficos de al-Andalus, Granada,
CSIC, 1989, pp. 307-327; AGUIAR AGUILAR, Maravillas. Ciencia y emigrados
andalusíes a Fez en la LYadwat al-iqtibas de Ibn al-Qadi inédito.
(11) Sólo conozco la edición de la Dar at-tura
t de El Cairo aunque algunos autores citan una
edición de Rabat.
(12) Algunos investigadores anuncian su estudio como
tema de tesis doctoral de un estudiante de Rabat pero no tengo noticia de que
se haya realizado tal trabajo.
(13) Ed. Muhammad
Abu l-Ayfan, Beirut ,
1982.
(14) Abd Allah al-Amrani at-Titwani presentó una
tesis doctoral sobre esta lista. Su estudio ha sido publicado en Beirut, en
1983. No me ha sido posible localizarlo.
(15) Véase VIGUERA MOLINS, nota 8, pp. 183-184.
(16) Como estudios más
recientes véase LATHAM, J. D. Towards a study of Andalusian immigrations and
its place in tunisian history. Les
Cahiers de Tunisie, 1957, 5,
203-252. Existe traducción francesa de este trabajo: Contribution à l’étude des
immigrations andalouses et leur place dans l’histoire de la Tunisie. In:
M. de Epalza y J. Petit (eds.), Études sur les moriscos andalous en Tunisie,
Madrid-Túnez, ed. DGRC, 1973, pp. 21-63. También PETIT, O. Les relations
intellectuelles entre l’Espagne et l’Ifriqiya aux XIIIe et XIVe siècles. Ibla, 1971, 127,
93-121, LATHAM, J. D. Towns and
cities in Barbary : the Andalusian influence. The Islamic Quarterly, 1972, 16, 189 y ss.; y TALBI, Mohamed. Les
contacts culturels entre l’Ifr
iqiya Hafside (1230-1569) et le Sultanat Nasride
d’Espagne (1232-1492), In: Actas del II Coloquio Hispano-Tunecino de
Estudios Históricos (Madrid-Barcelona, mayo de 1972), Madrid, Inst.
Hispano-Árabe, 1973, pp. 63-90.
(17) Véase AGUIAR AGUILAR, Maravillas. La Risala
kafiyat al-sayb fi-l-camal bi-l-yayb de Izz al-Din ´Abd al-´AzÌz
b. Mascud. Edición, traducción y estudio. Tesis doctoral defendida en la
Universidad de La Laguna en 1995, inédita. AGUIAR AGUILAR, Maravillas. Las
aplicaciones del cuadrante de senos en agrimensura a través de un tratado árabe
oriental del siglo XIV. In: C. Álvarez de Morales (ed.), Ciencias de
la naturaleza en al-Andalus. Textos y Estudios IV
, Granada, CSIC, 1996, pp. 93-113.
(18) Véase AGUIAR AGUILAR, Maravillas. En torno a Izz
al-Din ´Abd al-´Aziz b. Mas´ud (siglo XIV): vida y reseña de sus obras
conocidas. Boletín de la Asociación Española de Orientalistas
, 1996, 32, 187-196. Próximamente Mónica
Herrera Casais presentará en la Universidad de La Laguna su memoria de
licenciatura en la que ha llevado a cabo la edición y traducción de un opúsculo
de tema astrológico de este autor.
(19) Véase SAMSÓ,
Julio. An outline of the history of Maghribi zijes from the end of the
thirteenth century. Journal for the
History of Astronomy. 1998, 29,
93-102 (96).
(20) MAQQARII, nota 9, vol. II, pp. 692-694; SUTER,
H. Die Mathematiker und Astronomen der Araber und ihre Werke, Leipzig,
1900, nº 444, pp. 180-182; BROCKELMANN, C. Geschichte der Arabischen
Literatur, Leiden, E. J. Brill, 1949, vol. 2, pp. 343- 344 y S. II, pp.
363-369; SAMSÓ, nota 2, pp. 403-409. Estudios sobre su vida y su obra: WOEPCKE,
F. Traduction du traité d’arithmétique d’Aboûl-Haçan Alî Ben Mohammed
Alkalçadi.In: Atti dell’Accademia pontificia de’ nuovi lincei,
1858-1859, 12, pp. 399-438; RÉNAUD, H.P.J. Sur l’origine du nom d’al-Qalaes.adi.
Isis, 1945-46,36, 69-70; SOUISSI, M. c.Alim riy.a.di andalusi.
Al-Qalaes .adi. Hawliyy.at al-Yami´a al-Tunisiyya, 1972, 9,
33-49; SOUSSI, M. Un mathématicien tunisoandalou: al-Qalasadi.In: Actas..., nota
16, pp. 147-169; SAIDAN, A. S. Al- Qalaes.adi.In: Dictionary of Scientific
Biography, vol. 11, pp. 229-230; .YABB.AR, A. Al-Qalasadi: c.alim
andalusi-magrib i min al-qarn al-j.amis caksar.Al-´ilm wa-l-tiknuluyiya
(Revue Arabe des Technologies), 1990, 9, 12-23.
(21) Ed. M. Ab.u Ajyf.an, Túnez, 1979.
(22) Véase SAMSÓ, nota 3, p. 413.
(23) Véase AGUIAR AGUILAR, Maravillas; GONZÁLEZ
MARRERO, José Antonio. El tratado astronómico del sexagenarium: una
aportación mudéjar valenciana a la historia de la ciencia. Sharq al-Andalus.
Estudios Mudéjares y Moriscos, 1996, 13, 183-202.
(24) El tratado valenciano y su traducción latina
inacabada han sido ya editados y traducidos por los mencionados autores pero es
un trabajo por el momento inédito.
(25) Véase AGUIAR AGUILAR; GONZÁLEZ MARRERO, nota 23.
Los autores trabajan en la actualidad en la traducción de este texto.
(26) Véase CALVO, nota 2, p. 122.
(27) Véase SAMSÓ, nota 3, p. 417. El legado...,
nota 3, p. 227. MENDOZA, A. El astrolabio del Museo Arqueológico de Granada.
Boletín de la Real Academia de Bellas Artes de
Granada, 1990, 1, 139-167.
No hay comentarios:
Publicar un comentario