GAMBAS
AL WHISKY CON REDUCCION DE SALSA PIMIENTOS
El
vapor de la malta pura y el sabor agridulce de los pimientos, subrayan la
delicadeza de las gambas, crustáceos deliciosos de los que definitivamente
nunca nos cansamos.
Ingredientes
12 Gambas
1 Pimiento rojo grande
2 Chalotas
1 Diente de ajo
Aceite de oliva virgen extra
Mantequilla
1 Pimiento seco pequeño
1 Ramita de tomillo
Sal Pimienta negra recién molida
Caldo de pescado (fumet)
5 cl de wisky de malta (si
no tienes de malta, uno bueno)1/2 Limón,
el zumo
Elaboración
Pelamos las gambas, reservando
cabeza y caparazón y el cuerpo en el frigorífico.
Pelamos (opcional), el
pimiento rojo, quitamos, limpiamos de semillas y cortamos en dados pequeños.
Cortamos las chalotas en
daditos pequeños.
Trituramos el diente de ajo.
En una sartén de fondo
grueso, calentamos una mezcla de mantequilla y aceite de oliva virgen extra, y
cuando este caliente agregamos las
cabezas y caparazones de las gambas, cocinándolas a fuego alto para suelten
todo su jugo, removiendo de vez en cuando. Cuando hayan tomado color, bajamos
el fuego, machacamos las cabezas con una cuchara de madera. Para extraer todos
los jugos, y agregamos las chalotas picadas, el pimiento rojo picado y el ajo
triturado, removemos muy bien, agregamos una pizca de pimienta seco, una ramita
de tomillo, sal y pimienta negra recién molida, removemos bien y rehogamos unos
minutos. Cubrimos hasta cubrir con el caldo de pescado y cocinamos a fuego
lento, hasta obtener un jugo muy reducido, pero aún no almibarado. Filtramos
por un chino, trituramos las gambas para
extraer lo mejor. Reservamos la salsa.
Calentamos un poco de aceite
de oliva virgen extra en una sartén y doramos las gambas a fuego alto para que
tomen un bonito color, sin caramelizarlas, bajamos el fuego y añadimos una nuez
de mantequilla y seguimos cocinando unos minutos, rociando las gambas con el
whisky de malta (podéis usar el whisky que tengáis en casa, pero que sea bueno)
para desglasar, y dejamos que se evapore sin dejar de regar las gambas por
encima con una cuchara.
Cuando apenas queda líquido,
colocamos las gambas en los platos o en una fuente caliente y vertemos el caldo
o salsa reducida en la sartén, agregue unas nueces de mantequilla para
redondear y unir, agregamos una pizca de zumo de limón y ajustamos el
condimento, una vuelta de pimienta y una pizca de sal.
Servir inmediatamente.
¡Buen provecho!