MIGUELITOS

MIGUELITOS

Un “MIGUELITOS”, es un pastel muy simple, que creo que procede de La Roda 8Albacete),  afortunadamente es fácil de elaborar y no requiere muchas habilidades en la cocina. Simplemente desenrolle, corte y hornee hojas de hojaldre, prepare una crema pastelera simple, para ponerla como relleno, y espolvoree el hojaldre con azúcar glas, y ¡disfruta que son dos días!

Ingredientes

2 Hojas de hojaldre

1 Huevo para pintar el hojaldre

600 ml de leche

8 Cucharadas de azúcar

¼ de cucharadita de extracto de vainilla

3 Yemas de huevo

3 Cucharadas de maicena

1 Rama de canela

La cascara de ½ limón

Azúcar glas para decorar

Elaboración

Precalentamos el horno a 200º.

Descongelamos la masa de hojaldre (si es congelada) 20 minutos, si es refrigerada no hace falta. Con un cuchillo muy afilado, cortamos la masa en cuadrados de 4 centímetros de ancho.

Colocamos sobre placa de horno los cuadrados de hojaldre. Batimos el huevo y con una brocha de silicona, cepillamos los cuadrados de hojaldre. Metemos en el horno en la mediación del mismo y horneamos durante 10 o 12 minutos, o hasta que la masa se dore por encima y este crujiente. Sacamos y dejamos enfriar.

Preparamos la crema pastelera: Vertimos la mitad de la leche en una cacerola, y añadimos la canela, el extracto de vainilla y la cascara de limón, calentamos a temperatura alta hasta llevar a ebullición, luego reducimos a baja. Prestando mucha atención de que la leche no se nos queme.

En un bol, batimos las yemas de huevo, y el azúcar granulada, hasta doblar su volumen y tenga un color blanquecino, vertimos el resto de leche y la maicena, previamente diluida en la leche, batimos muy bien para integrarla.

Retiramos la canela y el limón de la leche tibia.

Añadimos la leche con la maicena a la leche tibia, y batimos enérgicamente para integrar todo, y batimos continuamente hasta que la crema espese. Retiramos del fuego y dejamos enfriar.

Abrimos cada cuadrado de hojaldre  por el centro y rellenamos con la crema pastelera, colocamos la otra mitad por encima y espolvoreamos con la ayuda de un colador el azúcar glas.

Hay pasteleros que no los rellenan, los impregnan de jarabe de azúcar y miel, creando igualmente una delicia sabrosa. Otros los rellenan de nata montada, etc.  Esto es solo cuestión de gusto.

¡Buen provecho!