viernes, 18 de mayo de 2018

ENSALADA FRIA CON PATATAS


ENSALADA FRIA CON PATATAS



Como parece que se acerca el buen tiempo, al menos las temperaturas. Para refrescar los almuerzos, Ahora en que aun hace un poco de calor, esta ensalada es ideal, muy completa, refrescante y sabrosa.

Ingredientes
1 K de patatas
6 cucharadas de mayonesa (al gusto)
2 Cebollas
10 Pepinillos en vinagre
Aceitunas verdes sin hueso (opcional)

Elaboración
Hervimos las patatas hasta que estén tiernas. Las pelamos, dejamos templar un momento fuera de la olla.

Pelamos las patatas y cortamos en dados, y las echamos en una ensaladera o fuente según guste.

Picamos las cebollas en daditos.

Los pepinillos en daditos e igualmente,  si se desea las aceitunas.

Mezclamos bien los ingredientes, añadimos la mayonesa y volvemos a mezclar bien todo para que se integren bien y queden impregnados de mayonesa.

Refrigerar en el frigorífico una hora.

Servir fría.

Es deliciosa para acompañar una barbacoa en familia, o bien como un entrante.

Buen provecho

HISTORIA DE AL-ANDALUS : Sobre la Granada andalusí


Historia de al-Andalus
Camilo Álvarez de Morales y Ruiz Matas
Escuela de Estudios Árabes (CSIC)
Granada va a estar presente a lo largo de toda la historia de la España musulmana. Como provincia (cora de Ilbira) dependiente de un poder central, primero los omeyas de Damasco y los de Córdoba, como parte del imperio de los almorávides y los almohades norteafricanos, o como reino independiente en dos ocasiones, el último de los cuales, el Nazarí, cerró el ciclo histórico de presencia musulmana en la Península.
La cora de Ilbira
Territorialmente fue una de las más extensas de al-Andalus. Sus límites eran al norte la cora de Yayyan (Jaén), al este la cora de Tudmir (Murcia) y el Mediterráneo, al sur también el Mediterráneo y al oeste la cora de Rayya (Málaga) y Cabra. Comparándola con la actual provincia, vemos que englobaba algunas plazas que hoy son de Jaén (Alcalá la Real, Alcaudete, Castillo de Locubín y Huelma), mientras que Baza y Huéscar, actualmente de Granada, formaban entonces parte de la de Jaén. Se incluían en la cora de Ilbira gran parte de las tierras que hoy son de Almería, con excepción de las zona norte de la Sierra de Filabres, que se repartía entre Jaén y Tudmir. Otras dos plazas cambiaban de ubicación, respecto a la división provincial de hoy. Eran Priego, actualmente de Córdoba y entonces de Ilbira, y Alhama, hoy en tierras granadinas y en aquellos años dentro de la cora de Rayya. El centro de la cora lo ocupaban las ciudades de Ilbira y Garnata, esta última por entonces una simple aldea fortificada con una población mayoritariamente judía. En general, se puede decir que en el siglo X la cora estaba constituida por una zona central eminentemente agrícola, con la Vega como máximo exponente, rodeada por tierras de explotación ganadera, situadas, básicamente, en la costa, las Alpujarras y los Montes.
Granada se constituye en reino por primera vez
Desde 1013 hasta 1090 Granada fue reino independiente bajo la familia beréber de los Ziríes. Cuando cayó el califato cordobés, en un proceso que duró de 1009 a 1031, el territorio de al-Andalus se fragmentó en diversos reinos independientes, que la historia conoce como Reinos de Taifas. Desaparecido el poder central de Córdoba y con la antigua capital sumida en una terrible guerra interna entre distintos grupos, que acabó con la destrucción y el saqueo de la ciudad y de Medina Azahara, los gobernadores de las principales ciudades de al-Andalus y los personajes más influyentes de la antigua corte omeya se repartieron el poder.
En la antigua cora de Ilbira se asentó la familia Zirí, beréberes norteafricanos llegados a la Península a finales del siglo X. El nuevo territorio pasó a ser reino, cambiando el nombre de Ilbira por el de Granada, por el traslado de la capital del antiguo núcleo al nuevo asentamiento que llevaba este nombre.
En su momento de mayor expansión lo constituía toda la actual provincia de Granada y, además, parte de las de Málaga y Jaén. Los límites los marcaban las proximidades de Baza, Jaén, Málaga y Écija.
Cuatro miembros de la familia zirí ocuparon el trono. El primero fue Zawi ibn Zirí, al que sucedió su sobrino Habus ibn Maksan, a éste su hijo Badis ibn Habus, con el que el reino alcanzó su apogeo, siendo el último su nieto Abd Allah.
El reinado de Badis va a estar marcado por su particular relación con la familia judía de los Banu Nagrella y los sucesos ocurridos con los judíos granadinos. Esta familia tuvo un importantísimo papel en la política y la economía del Reino, creando tensas situaciones que culminaron el 1066 con un levantamiento de todo el pueblo contra ellos y sus hermanos de religión, provocando una gran matanza.
A finales del siglo XI la presión cristiana sobre los reinos taifas obligó estos a pedir ayuda al otro lado del Estrecho, al imperio almorávide, de reciente aparición en el panorama político de su tiempo. Los almorávides vinieron a la Península dos veces entre 1086 y 1088, consiguiendo frenar el avance cristiano, volviendo, por tercera vez, en 1090 para asentarse definitivamente en al-Andalus, eliminando a los reinos taifas e imponiendo su gobierno. El primer reino que ocuparon fue el de Granada.
El territorio granadino durante el gobierno de los almorávides y los almohades
Al integrase en el nuevo imperio, Granada albergó a un gobernador almorávide y tuvo un papel importante en las operaciones militares de su época. Tras unos primeros éxitos militares, los almorávides sufrieron varias derrotas a manos cristianas y ello, unido a una relajación de costumbres y al descontento de la población andalusí, condujo a su final. Mientras ocurría todo esto, en el Magreb se empezaba a fraguar un nuevo imperio, el almohade.
Los almohades llegaron a al-Andalus empujados por su afán expansivo y llamados por los andalusíes ante la ineficacia de los almorávides en su lucha contra el avance cristiano. Se puede considerar que ya desde 1146 la Península estaba ocupada por los almohades, aunque Granada se mantuvo a favor de los almorávides hasta 1156, en que, viéndose aislada, se entregó.
Durante el período de dominación almohade, como del almorávide, pocas son las noticias que tenemos relativas al territorio granadino, pero hay que resaltar que Granada siempre fue tomada como base de operaciones norteafricanas en el dominio y control de la zona nordeste peninsular.
El Reino nazarí
Tras la marcha de los almohades de al-Andalus, en 1228, siguió un breve período de lucha entre varios señores musulmanes por la hegemonía de lo que quedaba de territorio islámico. Uno de los personajes que más sobresalió fue Muhammad b. Nasr, sublevado en 1232 en Arjona. Tras un pacto de vasallaje con Fernando III el Santo, se consolidó en 1237 como soberano y fundador de la dinastía nazarí de Granada, último bastión musulmán de la Península, con categoría de reino. Fue la segunda vez que Granada ostentó este título.
El Reino nazarí, abarcaba las actuales provincias de Granada, Málaga y Almería, además de algunas áreas pequeñas de Cádiz y Jaén. El número de gentes que habitaban aquellas tierras se calcula en unas 300.000. Los grandes núcleos urbanos eran Málaga, con 20.000 habitantes, Almería, con 9.000 y Guadix, con una población que oscilaba entre 6.000 y 10.000 habitantes. Granada, la capital, tenía 50.000.
Desde los primeros años de su existencia hasta su desaparición en 1492 en su historia los periodos de paz alternaron con otros en los que las tensiones estuvieron presentes, formando parte de un cuadro de luchas internas y externas. En el exterior hizo y deshizo alianzas con Castilla, Aragón y los benimerines de Marruecos, unas veces amigo, otras enemigo de cada uno de ellos, buscando su supervivencia. En el interior, se vivieron graves situaciones provocadas por las intrigas cortesanas, instigadas y mantenidas por las familias poderosas, con los Abencerrajes, los Comixa, los Alamines y los Venegas, como más representativos, que subían al trono o lo arrojaban de él a los soberanos según sus intereses. Eran situaciones alentadas por Castilla en algunos casos, porque favorecían su relación con Granada. Varios soberanos reinaron en dos ocasiones distintas y uno, Muhammad IX, lo hizo en cuatro.
Fueron veintitrés los sultanes de Granada. Trece llevaron el nombre de Muhammad, cinco el de Yusuf, dos el de Ismail, uno el de Nasr, otro el de Sa`d y otro el de Abu l-Hasan Ali. Algunos han sido más conocidos por un nombre distinto al que le correspondía oficialmente, siendo los más destacados los de Abu l Hasan Ali, conocido generalmente por Muley Hacén, que corresponde a la expresión árabe mi señor Hasan, y su hijo Muhammad, el tan conocido Boabdil, equivalente a Abu `Abd Allah.
La última guerra civil y el fin del reino
La última guerra civil del Reino nazarí de Granada se desarrolló entre 1482 y 1489. Los protagonistas directos fueron, por un bando, Muley Hacén y su hermano El Zagal, y, por el otro, Boabdil, hijo de Muley Hacen, que en 1482 huyó de Granada y se rebeló contra su padre. Mientras, seguía la lucha contra los Reyes Católicos, al fin los beneficiados de esta situación.
La muerte de Muley Hacén en 1485 hizo que sus partidarios reconocieran como soberano a El Zagal, que, al mismo tiempo que luchaba contra los cristianos, siguió su enfrenamiento con Boabdil. Instalado el primero en la Alhambra y el segundo en el Albacín, por las calles de Granada corrió la sangre de sus habitantes alineados con uno u otro.
No pudiendo mantener los dos frentes, El Zagal se entregó a los Reyes Católicos en 1489, quedando como único soberano Boabdil. La postura de éste fue siempre ambigua. Una política de vasallaje con los Reyes Católicos, que arrancaba de los primeros momentos de su reinado, le llevó a una situación de alianza con ellos, en los que las víctimas fueron los granadinos.
La figura de Boabdil presenta un triste análisis. A lo largo de su reinado participó más activamente en su lucha fratricida que contra los cristianos, y en las contadas ocasiones que lo hizo contra estos siempre fue derrotado. Por sus intereses personales comprometió la suerte de su reino en provecho de los Reyes Católicos, sintiéndose más obligado a cumplir sus pactos con ellos que con los musulmanes de sus tierras, a los que traicionó varias veces. Mal visto por sus contemporáneos, de uno y otro bando, juzgado culpable por los alfaquíes, entregado a voluntades ajenas, los granadinos más motivos tuvieron para reprocharle que para agradecerle. A finales de 1491, a espaldas de los habitantes, pactó con los monarcas cristianos la entrega de la ciudad, que se hizo efectiva el 2 de enero de 1492.
Así terminaba la presencia de territorios musulmanes con dominio efectivo y oficialmente reconocido sobre tierras de la Península.

TARTA DE CUMPLEAÑOS "CELIA"


TARTA DE CUMPLEAÑOS “CELIA”



Entretenida de hacer, pero el resultado final lo merece.
Ingredientes
Bizcocho:
4 Huevos
120 gr de harina
120 gr de azúcar
1 Cucharada de levadura en polvo
Crema de mantequilla:
250 gr de mantequilla
125 gr de azúcar glas
1 cucharada de sabor (vainilla, café, chocolate o fruta….)
2 Cucharadas de café
Crema de limón:
100 gr de azúcar glas
El zumo de 2 limones
50 gr de mantequilla
2 Huevos
Ralladura de limón
Almendras laminadas para decorar

Elaboración
Para hacer el bizcocho, mezclamos en un bol el azúcar y los huevos, batimos muy bien hasta que doble su volumen y tenga un color blanquecino.

Incorporamos la harina tamizada con la levadura a la vez que vamos batiendo, cuando todos los ingredientes estén bien integrados, lo pasamos a un molde bien engrasado y que sea desmoldable.

En horno previamente calentado a 180º.

Metemos en el horno y horneamos hasta que veamos que tiene un color dorado y que la aguja de comprobación salga seca.

Para la crema de mantequilla, en un bol ponemos la mantequilla con el azúcar, y batimos bien con una varilla manual o eléctrica, lo importante es que se integran bien los ingredientes, añadimos el aroma que deseemos sin dejar de batir y azúcar vainillada, todo sin dejar de batir hasta que la mezcla brille lo suficiente.

Para la crema de limón, mezclamos todos los ingredientes, y lo ponemos al baño maría, habiendo batido todo muy bien para integrar todos los ingredientes, removemos bien hasta obtener una crema más espesa, la cual tamizaremos para evitar grumos.

Dividimos el bizcocho longitudinalmente en dos, extendemos la crema de mantequilla en la primera parte y coloque la otra parte encima. Cubrimos todo el exterior de la tarta con la crema de limón así como la superficie superior. Decoramos los laterales con almendras laminadas. Dejamos enfriar un poco en el frigorífico.

Extendemos la crema de limón en la parte superior de la tarta y dibujamos sobre ella círculos con un palillo al que le hemos agregado un poco de cacao en polvo para dar un color más oscuro y se vea bien los dibujos.

Riquísima.

Buen provecho.

jueves, 17 de mayo de 2018

ESTOFADO DE RABO DE BUEY A LA "MALAGUEÑA"

ESTOFADO DE RABO DE BUEY A LA “MALAGUEÑA”



Ingredientes
1 Rabo de buey (2 kilos) cortado en secciones
4 Zanahorias
4 Patatas
1 Tallo de apio
2 Cebollas
1 Pimiento rojo
4 Dientes de ajos
1 Clavo de olor
100 gr de tocino o panceta
2 Hojas de laurel
Una cucharada de harina
300 gr de salsa de tomate
Albahaca picada
1 Cucharadita de pimentón
1 Cucharadita de tomillo
1 Botella de vino  oloroso amontillado de BODEGAS NAVARRO, (Montilla-Moriles)
2 Cucharadas de piñones
Aceite de oliva virgen extra
Pimienta negra recién molida
Pimienta en grano una pizca
Sal

Elaboración
Pelar y cortar,  las zanahorias en dos trozos y las patatas en cuatro trozos. Las cocemos al vapor. Si se van a poner de guarnición.

Cortar el apio en trozos.

Pelar y picar los ajos y las cebollas en trozos.

Cortar el tocino o panceta en trozos.

En el vaso de la minipimer o licuadora, ponemos el apio, la cebolla, el tocino y triturar un poco.

En una olla con aceite de oliva virgen extra (unas 3 o 4 cucharadas, ponemos a calentar y cuando este caliente, agregamos los trozos de rabo de buey bien enharinados y salpimentados, doradoindolos por todos lados para sellarlos bien, unos 10 minutos aproximadamente.

Añadimos una cucharada o dos de aceite de oliva virgen extra, el ajo, los piñones, el contenido del vaso de la minipimer o licuadora, la hoja de laurel, un clavo de olor, saltear por 3 minutos removiendo bien para mezclar y que el rabo coja todos los sabores.

Añadimos la salsa de tomate, la albahaca,  el pimentón, la sal, y la pimienta en grano, y dejamos cocer a fuego medio, unos 5 minutos moviendo de vez en cuando para que se mezclen bien los ingredientes.

Añadimos el vino oloroso, removemos y dejamos cocer a fuego lento sin hervir.
Añadimos las patatas y las zanahorias, y cocer a fuego lento durante una hora y que veamos que reduce el hueso y los jugos.

Servimos el rabo con las patatas y la zanahoria, o unas patatas fritas  también les viene muy bien, eso a gusto del consumidor.

Buen provecho.

PAN DE ANIS


PAN DE ANÍS

Cuando era niño, de eso hace mucho,  estos panecillos los hacia una confitería en Málaga, y a mí me chiflaban. Mi padre me los compraba de vez en cuando, creo que la confitería se llamaba "María Maní"



Ingredientes
40 gr de levadura de panadero
1 Cucharada de azúcar
½ taza de agua tibia
600 gr de harina
1 Cucharadita de sal
150 gr de azúcar
100 gr de mantequilla  a temperatura ambiente
2 Huevos
1 y ½ cucharada de matalahúva
1 cucharada de anís o un chupito
¾ Taza de leche caliente.

Elaboración
En un bol, desgranamos la levadura, el azúcar y el agua tibia. Mezclamos bien hasta que la levadura este completamente disuelta. Tapamos el bol.

En otro bol, ponemos el azúcar, la mantequilla y la leche caliente, mezclando enérgicamente para que la mantequilla se derrita y el azúcar se incorpore a la mezcla. Dejamos entibiar y añadimos la matalahúva. El anís, los huevos bien batidos y la levadura, mezclamos bien para integrar todos los ingredientes.

Agregamos la harina poco a poco junto con la sal, al mismo tiempo que vamos mezclando con una cuchara de madera, hasta que el líquido sea absorbido por la harina y se forme una masa homogénea y compacta, pero que no quede dura.

Apoyar una de las manos en el inferior de la masa y con la otra ir estirándola y replegándola varias veces seguida (amasar). Luego girar la masa 90º y continuar con estos movimientos, hasta que la masa, se torne lisa, no pegajosa.

Formar bollos con las manos y colocarlos en una placa lo suficientemente grande pues el bollo duplicara su volumen. Cubrir la placa con papel film y luego con un paño. Este proceso puede durar aproximadamente 30 minutos.

Una vez levada la masa, volcamos sobre una superficie aceitada cada bollo, haciendo unos movimientos de amasado para quitarle el gas de la fermentación, y que vuelva a su forma inicial.

Hacer cilindro con ellas sobre la mesa y cortarlas en porciones iguales para hacer panecillos chicos, del tamaño que nos guste.

Colocarlos sobre una placa de horno limpia, dejando espacio entre cada panecillo. Colocar un paño encima de ellos durante 10 minutos.

Antes de meterlos en el horno, pintamos con huevos y rociamos con matalahúva.
Metemos en horno precalentado a 200º.

El tiempo de cocción es de entre 12 a 15 minutos aproximadamente.

Una sacado dejar enfriar sobre una rejilla.

Servir frio.

Buen provecho.

FONDO DE ALCACHOFAS CON QUESO DE CABRA CALIENTE


FONDO DE ALCACHOFAS CON QUESO DE CABRA CALIENTE



Ingredientes
4 Alcachofas cocidas de España,  TUDELA (www.alcachofas,es)
Queso de cabra sin costra
2 Cucharadas de nata de cocinar
2 Yemas de huevo
Mantequilla
Tomillo
Sal
Pimienta negra recién molida

Elaboración
Precalentar el horno a 180º.

Doramos suavemente los fondos de alcachofas en una sartén con mantequilla, y una vez dorados lo colocamos en una fuente de horno.

En una olla calentamos la nata. Derretimos el queso de cabra en ella, la sal y pimienta negra recién molida con gusto.

Añadimos las yemas de huevo y removemos vigorosamente.

Rellenamos los fondos de alcachofas con esta preparación.

Espolvoreamos con tomillo.

Horneamos los fondos de alcachofas unos 10 minutos solo con el grill del horno.

Servir caliente.

Si se quiere se pueden servir con una pequeña cama de ensalada aliñada con aceite de nuez.

Buen provecho

martes, 15 de mayo de 2018

LOMO DE CERDO RELLENO AL HORNO


LOMO DE CERDO RELLENO AL HORNO



Ingredientes
1 Cinta de lomo de 1 kilo aprox.
100 gr de panceta picada
2 Cebollas picadas
150 gr de champiñones picados
150 gr de nueces picadas
2 Cucharadas de pimienta de varios colores
4 Cucharadas de aceite de oliva virgen extra
60 gr de Mantequilla
Sal
Pimienta negra recién molida

Elaboración
Sobre una superficie plana, extendemos la cinta de lomo y con un cuchillo bien afilado lo vamos abriendo longitudinalmente, del grosor de 2 o 3 centímetros de grosor.

Aplanamos con un aplanador y reservamos.

Freímos el tocino a fuego medio hasta que suelte su grasa, luego añadimos los champiñones y la cebolla y cocinamos hasta que la cebolla este transparente. Añadimos 100 gramos de nuez picada y cocinamos 5 minutos más removiendo para integrar todos los ingredientes.

Precalentamos el horno a 180º.

Sobre la cinta de lomo extendida, salpimentamos, y sobre ella extendemos los rellenos que anteriormente hemos cocinado. Enrollamos la cinta de lomo y la  atamos bien comenzando por las puntas para que no se nos salga el relleno.

Trituramos las nueces y las pimientas de colores, y cubrimos todo el exterior del rollo con esta mezcla.

Calienta el aceite en una sartén grande y sella el rollo de cinta de lomo en ella por todos lados. Lo colocamos una vez sellado en una fuente de horno y rociamos sobre el rollo  toda la superficie del mismo con la mantequilla.

Horneamos durante una hora, dándole la vuelta alguna vez para que dore bien por todos lados.

Servir caliente o frio, según se desee, cortado en lonchas... La guarnición a gusto del comensal.

Maridaje
Yo lo maridaría con un buen tinto o un vino blanco joven, tan bueno es uno como otro a la hora de comer este delicioso rollo de cinta de lomo relleno.

Buen provecho


ENSALADA DE PATATAS "APROVECHAMIENTO"


ENSALADA DE PATATAS “APROVECHAMIENTO”



Ingredientes
500 gr de patatas lavadas
4 Ramas de apio blanco
4 Cebolletas
El jugo de medio limón
1 Cucharada de vinagre de vino blanco
2 Cucharadas de perejil fresco picado
3 Cucharadas de mayonesa
3 Cucharadas de queso crema
Nuez moscada
Sal
Pimienta negra recién molida

Elaboración
En una olla con sal y una cucharada de vinagre, cocemos las patatas durante 20 o 25 minutos, comprobando con la punta de un cuchillo si están tiernas. Escurrimos y dejamos secar en el fuego por unos minutos, moviéndolas. Sacamos y dejamos templar, una vez templadas, las pelamos y cortamos en dados grandecitos, y dejamos enfriar.

Cortamos el apio una vez lavado en rodajas, y mezclamos con las patatas en un bol, rociamos con perejil picado y removemos.

Picamos las cebolletas y la añadimos al bol y removemos.

Mezclamos la mayonesa con el queso crema, sazonamos, añadimos el jugo de limón, nuez moscada y la pimienta negra recién molida, mezclamos bien.

Añadimos esta mezcla a la patatas y removemos bien para impregnar las patatas bien, y que todos los ingredientes cojan la salsa.

Dejamos enfriar en la nevera un par de horas.

Servir frías

Buen provecho

lunes, 14 de mayo de 2018

HUEVOS A LA FLAMENCA A MI ANTOJO


HUEVOS A LA FLAMENCA A MI ANTOJO



Ingredientes
4 Cucharadas de aceite de oliva virgen extra
4 Huevos
1 Cebolla muy picada
2 Dientes de ajos muy picados
2 Pimientos rojos frescos, limpios, muy picados
4 Tomates pelados y sin semillas cortados en daditos
1 Cucharadita de perejil picado
1 Lata pequeña de maíz escurrida
Sal
Pimienta cayena molida

Elaboración
Precalentamos el horno a 180º.

Calentamos el aceite de oliva virgen extra en una sartén, añadimos la cebolla y el ajo, rehogamos bien. Agregamos los pimientos y rehogamos por 10 minutos. Añadimos el tomate y el perejil, sazonamos al gusto con sal y pimienta cayena en polvo, mezclamos y cocinamos unos 5 minutos más. Añadimos el maíz, removemos y retiramos del fuego.

Vertimos esta preparación en cazuelitas al uso, para horno, hacemos con el dorso de una cuchara un hoyo en el centro de cada cazuelita y cascamos un huevo en cada una de ellas en el centro de la misma.

Horneamos durante 15 minutos, o hasta que la clara se halla solidificado.

Servir caliente

Sugerencia
Si se desea se puede rociar con unos trocitos de jamón serrano antes de meterlos en el horno.

Buen provecho