FEKKAS
DE ALMENDRAS DULCES
Como
es habitual, esta vez no me ha dado la receta mi amiga Fátima, sino un amigo que está casado con una marroquí de Tetuán.
Las
fechas son galletas pequeñas, dulces y secas que se pueden disfrutar con una
taza de té o café, duran mucho tiempo guardado en una caja metálica hermética.
Estas delicias de almendras, marroquíes se comen sin hambre. Puedes agregar
frutos secos en su interior además de almendras o hacerlas saladas con albahaca
o cualquier otra especia. Es fácil de elaborar, pero requiere dos pasos de
cocción, y si le agregamos un poco de agua de azahar, están aún más deliciosas
(las probé en su casa sin azahar, yo las he elaborado con agua de azahar).
Ingredientes
1 K de harina
120 gr de azúcar
120 gr de mantequilla en
pomada
5 Huevos
2 Sobres de levadura en
polvo
1 Puñado grande de almendras
sin piel
¼ de vaso de agua de azahar
Frutos secos (opcional)
Elaboración
Precalentamos el horno a
160º.
En un bol, mezclamos la
mantequilla en pomada con el azúcar, hasta obtener una mezcla homogénea.
Agregamos los huevos, y con
una varilla, los batimos muy bien para su integración total con la mantequilla
y el azúcar.
Tostamos ligeramente las
almendras en el horno, y la agregamos a la masa anterior, mezclando bien para
su incorporación en la masa.
Vertimos sobre el bol, el
agua de azahar, y volvemos a mezclar.
Incorporamos la harina
tamizada, poco a poco con la levadura en polvo para evitar grumos, todo ello
sin dejar de amasar, ya con una cuchara de madera o espátula de madera.
Ajustamos con harina si es
necesario o leche según el estado de la masa, para que sea lo suficientemente
maleable.
Con la masa, formamos 4
salchichas lo más larga posible y las colocamos en una bandeja de horno
cubierta con papel de horno.
Metemos en el horno, y
horneamos durante 15-20 minutos aproximadamente.
Las sacamos del horno y
dejamos enfriar. Una vez frio, cortamos en rodajas finas que volveremos a
colocar en la bandeja del horno.
Volvemos a meter en el horno
y horneamos durante 5 minutos aproximadamente para dorar las fekkas.
Buen disfrute de ellas con
un té o café.
¡Buen provecho!
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