SARDINAS
ABIERTAS CON SALSA DE LIMÓN, ACEITE DE OLIVA Y PEREJIL
Esta
receta, es un aperitivo que al menos en mi casa, se hacía de vez en cuando, pues a todos nos gustaba. Mi
madre era un crack en la cocina, así que considero esta receta malagueña y más
que cuando compro las sardinas, sé que son de la bahía de Málaga.
Ingredientes
8 Sardinas abiertas, limpias
de cabeza, entrañas y espinas
Sal
Pimienta negra recién molida
50 ml de aceite de oliva
virgen extra
½ Limón
Perejil
1 Diente de ajo
Elaboración
Enjuagamos muy bien las
sardinas bajo el grifo con agua fría, las escurrimos muy bien. Las colocamos
sobre una fuente bien escurrida y salpimentamos al gusto. Las dejamos reposar
para que cojan los sabores.
Preparamos la salsa: En un mortero, colocamos la ralladura de ½ limón,
el diente de ajo pelado y picado, el perejil picado muy finamente, un poco de
sal y majamos muy bien hasta formar una papilla, agregamos el aceite de oliva,
y el jugo del ½ limón, removemos bien dentro del mortero para que se integren
bien los ingredientes, probamos la salsa si está en su punto de limón y lista.
Procurar que quede la salsa sueltecita.
En una sartén,
antiadherente, o una parrilla al fuego, dejamos que esta se caliente bien...
Con una brocha de silicona, cepillamos bien las sardinas con un poco de aceite
de oliva, procurando que las sardinas estén bien abiertas, y cocinamos por
ambos lados, procurando que estén cocidas, cuidando mucho no pasarnos en su
cocción para que estén jugosas. Como es una carne tierna es poco tiempo el que
tarda en hacerse, así que tenemos que estar muy atentos.
Las colocamos en plato de
servir (o una fuente) una vez cocidas, y
rociamos con la salsa del mortero con la ayuda de una cuchara, procurando que
todas tengan la salsa por encima.
Servir de inmediato.
Lo ideal es acompañarlas con
una ensalada de tomate.
¡Buen provecho!
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