CROQUETAS
DE GAMBAS AL AJILLO
Esta receta de croquetas de gambas al ajillo, cremositas, dejaran a todos con la boca abierta.
Ingredientes
20 Gambas o langostinos
2 Dientes de ajo
100 ml de fumet o caldo de
pescado
400 ml de leche
3 Huevos
2 Cucharadas y media de
harina
2 Cucharadas de mantequilla
Pan rallado
Perejil fresco picado
Sal
Pimienta negra recién molida
Aceite de oliva
Elaboración:
Preparamos primero las
gambas al ajillo, calentando en una sartén,
añadimos un poco de aceite de oliva cubriendo el fondo, cuando este caliente
añadimos las gambas o langostinos pelados, reservando las cascaras y cabeza,
por si las necesitas para el caldo o fumet, los ajos cortados en láminas, y un
poco de sal. Cocemos fuego medio hasta
que las gambas estén lista, solo lo justo, unos 5 minutos aproximadamente.
Retiramos las gambas junto
con los ajos y escurrimos de aceite.
Realizamos a continuación la
bechamel, derritiendo la mantequilla en una sartén grande antiadherente y
echamos la harina, removemos bien hasta conseguir que la harian este bien
mezclada, es importante que la harina no este cruda y quede tostada.
A continuación vamos
añadiendo la leche poco a poco mientras removemos sin parar, incorporamos
entonces el caldo de pescado o fumet, un poco de sal y pimienta negra recién molida,
seguimos la cocción a fuego lento si dejar de remover para que la bechamel vaya espesando, sin
dejar de remover para que no se pegue al fondo, el objeto es obtener una masa
de croquetas bien cremosa y algo espesa.
Lista la bechamel y aún caliente, agregamos las gambas o
langostinos ajillo troceado en toritos pequeños y los ajos que apartamos
igualmente. Mezclamos todo muy bien y volcamos la masa de croquetas en una
fuente o bandeja grande para extenderla bien,
cubrimos con papel film para evitar que forme costra la superficie.
Dejamos enfriar a temperatura ambiente y después la metemos en el frigorífico,
una 5-6 horas.
Formamos las croquetas con
la masa ya fría, pasamos por huevo batido y después por pan rallado. Podemos
pasarla dos veces por huevo y pan rallado para asegurarnos que el relleno no se
va a salir y estará aún más cremoso.
Freímos las croquetas en
tandas de pocas unidades en abundante aceite de oliva bien caliente.
Una vez doradas, sacamos y
ponemos sobre plato o fuente con papel absorbente de cocina para quitar el
exceso de aceite.
Servimos bien calentitas.
Podemos acompañar si lo deseas con una buena ensalada.
¡Buen provecho!
No hay comentarios:
Publicar un comentario