miércoles, 16 de octubre de 2019

TORTAS FRITAS


TORTAS FRITAS


Ideales para días frio o lluviosos, sentados en la mesa camilla, rodeados de la familia o amigos, con un buen café o una infusión. Nos hace recordar a nuestra niñez cuando las hacían nuestras mamas o abuelas, recordadas cuando desprendían el olor al freírlas.

Ingredientes
500 gr de harina
150 gr de manteca de cerdo
1 Huevo batido
1 Cucharadita de sal
150 cc de agua frio o la necesaria
Azúcar
Manteca de cerdo para freír

Elaboración
En un bol, ponemos la sal con la harina e incorporamos la manteca de cerdo, trabajándola con las manos la masa, luego añadimos el huevo y seguimos amasando hasta integrarlo, y el agua fría poco a poco hasta obtener al amasar, una masa lisa pero blanda.

Dejamos descansar la masa en el frigorífico 30 minutos.

Sacamos del frigorífico, y con la ayuda de un rulo estiramos la masa hasta dejarla medio centímetro de espesor.

Con una corta pasta vamos haciendo tortitas de la forma que mas nos guste, o bien con los dedos de las manos, yo las he elaborado de las dos formas. (Para ver el resultado)

Freímos en abundante manteca de cerdo bien caliente, y sacamos cuando estén algo doradas y tiernas, nunca crocantes.

Sacamos y pasamos por azúcar. Dejamos enfriar y listar para comer.

¡Buen provecho!

martes, 15 de octubre de 2019

SOPA NAZARÍ


SOPA NAZARÍ



El clima y la riqueza del suelo nazarí del Reino de Granada, propicio disfrutar de una gastronomía, rica, variada y exquisita.

Ingredientes
1 Caparazón  y unas alas de pollo
3 Pimientos rojos
1 Cebolla
50 gr de miel de caña
Cominos molidos
Cebollino
4 Cucharadas de aceite de oliva virgen extra
Pimentón dulce
Sal
Nata para cocinar

Elaboración
Preparamos un buen caldo de pollo, con el caparazón las alitas de pollo y un buen puñado de perejil. Lo colamos y reservamos.

Asamos los pimientos, pelamos y quitamos pedúnculo y semillas.

En una cacerola, doramos la cebolla, pelada y cortada en juliana con el aceite de oliva virgen extra, y cuando estén transparentes, añadimos los pimientos asados y troceados. Seguimos cocinando unos minutos removiendo para que se integren bien.

Cubrimos con el caldo de pollo, añadimos el comino en polvo, el pimentón y la miel de caña. Dejamos que cueza a fuego lento durante 15 minutos.

Apartamos y trituramos con el brazo triturador, procurando que no queden trozos y si una crema muy suave.

Antes de servir rectificamos como siempre de sal y pimienta, y servimos rociando un poco de nata de cocinar y cebollino picado.

Riquísima sopa nazarí para el otoño e invierno...

¡Buen provecho!

LA COCINA EN AL-ANDALUS


LA COCINA EN AL-ÁNDALUS
 OCHOCIENTOS AÑOS DE TRADICIÓN CULINARIA HISPANO MUSULMANA EN TU MESA
TEXTO: MABEL VILLAGRA ROMERO
 ILUSTRACIONES: CELIA COE
 EDICIÓN: DIPUTACIÓN PROVINCIAL DE ALMERÍA
DEP. LEGAL: AL 597-2018 DISEÑO EDITORIAL: CELIA COE
 IMPRIME: ARTES GRÁFICAS M3
IMPRESO EN ESPAÑA ABRIL 2018
Es un  recetario que es sólo una pequeña parte de la riquísima y variada cocina de al-Ándalus. Una cocina que era en sí misma un goce de la vida y los sentidos, un placer donde los sabores y las sensaciones se unieron en un concepto en el que la comida no era sólo fuente de vida y alimento sino medicina, ya que la dieta como parte de la curación y el bienestar de una persona estaba pautada por la propia religión islámica. Ejemplo de ello son los trabajos de dietólogos y médicos andalusíes como Ibn Razi, Ibn al-Baytar, y ya en el siglo XV, el almeriense al-Arbuli.
Estas recetas son un regalo del pasado que nos llega de nuevo al presente desde antiguos manuscritos árabes y desde la tradición gastronómica popular española y que esperamos sean provechosas para ser cocinadas y también sean aliciente para disfrute de comensales y un pequeño punto de partida para el mayor conocimiento de la gastronomía histórica hispanomusulmana en nuestra región andaluza.
Los alimentos que se consumían en Al-Ándalus fueron muy diferentes en las áreas urbanas y en el ámbito rural y entre las diversas clases sociales.
En las ciudades, zocos y proveedores del campo ofertaban una gama de productos muy variada que podían comprarse frescos o cocinados, como ocurría con la harira (sopa con muchas especias aún presente en Marruecos), la harisa (guiso popular hecho a base de trigo, miel y caldo de carne) y algunos tipos de carne picada ya preparada.
En cuanto a los cereales, entre los más difundidos en Al-Ándalus estaban el sorgo, el mijo, el trigo candeal, la cebada y el centeno con el que se confeccionaban panes de varios tipos y sabores, pasta (fideos, itriya*, migas y cuscús) y gachas. 
Con legumbres se hacían sopas  y potajes espesos. Con la combinación de ciertos tipos de cereales, arroces, carnes, verduras, grasa animal e incluso leche o miel se hacían guisos como la asida y el tarid. La comida se cocinaba con aceite de oliva o con grasa animal, preferentemente manteca o sebo de cordero.  Las clases populares eran básicamente ovo-lácteo-vegetarianas y como sustitutivo de la carne, se comía el pescado hecho frito y rebozado (un antecedente del ‘pescaíto’ frito) y también preparado en escabeche o salazón que era común ver en puestos de comida del zoco. Entre las variedades de pescado más consumidas estaban los peces de agua dulce como el esturión o las anguilas y los de mar como el atún, la sardina, la caballa, la merluza y el salmón.
En cuanto a la carne, las clases altas consumían el cordero que era considerado un manjar a causa de su precio elevado y que fue elogiado por Al-Arbulí por sus propiedades dietéticas. También esas mismas capas sociales consumían otras carnes rojas como la vaca, la cabra, el carnero (también una excelente carne según Al-Arbulí) y la oveja, y muy a menudo, carnes blancas como el conejo o el pollo así como piezas de caza como la perdiz, la paloma, la codorniz y el faisán. La carne se podía cocinar guisada en su jugo o en asado y servida en salsas y desmenuzada formando salchichas, pinchos, albóndigas e incluso como hamburguesas tal como se hace hoy. 
Las clases más populares sólo consumían de tanto en tanto el despojo y la casquería de los animales, que para el almeriense Al-Arbuli tenían propiedades saludables y que se vendían a precio asequible en los mercados. Sólo en muy pocas ocasiones al año podían permitirse el consumo de carne -como la de cordero- coincidiendo con grandes ocasiones, como la Fiesta del Sacrificio.
Para aderezar todos estos platos se recurría a menudo al “almorí” (una pasta elaborada con harina miel, sal, uvas pasas, avellanas y almendras trituradas) así como a diferentes salsas hechas con una base de frutos secos machacados, especias o zumos de cítricos.
Muchos de estos menús se comieron acompañados de todo tipo de panes: Era popular un pan cenceño redondeado parecido al pan de pita actual, aunque también coexistieron variantes de panes que se hacían con trigo candeal consumido preferentemente por clases altas y otras variedades de cereales como el mijo, el trigo sarraceno o el centeno consumidas por todas las capas sociales andalusíes, y después mudéjares.
Los moriscos, tal como comenta Mercedes García-Arenal eran muy aficionados a una especie de tortas con aceite, queso o incluso ajo que cocinaban en losas calientes y que podían haber llevado rellenos como carne picada. Cuando escaseaba el trigo en épocas de hambruna, tal como afirma el arabista Camilo Álvarez de Morales, se usaban otras opciones “( ...) como el mijo, la cebada, el arroz e incluso se hacía con frutas (peras, manzanas, higos o membrillo) que se dejaban secar al sol, se trituraban, se desmenuzaban, se mezclaban con harina de algún otro cereal, se amasaba todo con aceite y se fabricaba el pan. A veces al pan se le añadían cominos, pasas, nueces o azafrán”. Aunque los panes eran hechos por panaderos profesionales, la mayoría de la gente hacía su propio pan en casa y lo cocía en hornos públicos (tannur) o en hornos privados, en el caso de las clases más altas.
Entre los lácteos vemos variedades de quesos, mantequillas y una especie de cuajada que se tomaba con miel. La repostería andalusí  destacó por el gran uso del azúcar, la miel y pastas como el hojaldre que se combinaba con quesos, especias y hierbas (menta, anís, canela ...), frutos secos como el pistacho, la almendra o el sésamo y frutas variadas con las que se hacen especialidades como buñuelos, almojábanas, empanadas dulces o almendrados. Otras especialidades serán el guirlache o el llamado ‘dulce blanco’, antecedente de la masa dulce usada para hacer el turrón. Muy célebres fueron también los arropes y mermeladas.
Como bebidas estaba muy difundida el agua de sabores con añadido de hojas de naranjo, pétalos de rosas o zumo de frutas que se convertían en sorbetes si eran refrescadas con nieve de montaña y a las que se podían añadir esencias y especias. También fueron populares los zumos de frutas, los mostos “mostazados” de uva o higos e incluso el vino fermentado de uva o dátiles que se consumían a pesar de la prohibición islámica.
En el periodo nazarí, Ibn al-Jatib nos da además valiosas noticias de una cerveza fabricada con técnicas orientales a base de cebada y arroz y que elogia como médico por sus cualidades diuréticas. 
Derivadas de la miel y muy dulces eran el hidromiel y el oximiel. 
Otras bebidas fueron el agua de canela y el ‘agua de cebada’, que se estuvo tomando en España hasta fechas recientes

DELICIAS DE CHOCOLATE NEGRO CON FRUTOS SECOS


DELICIAS DE CHOCOLATE NEGRO CON FRUTOS SECOS


Ingredientes
Cobertura de chocolate negro
Frutos secos tostados (avellanas, pistachos, anacardos)
Piña y albaricoques secos, etc.

Elaboración
Derretimos la cobertura de chocolate negro al baño maría, la temperatura deber ser de 50º, para una buena elaboración.

Rellenamos los moldes de silicona, y golpeamos para quitar las posibles burbujas de aire.
Para cada porción, añada a cada hueco de los moldes una porción de los frutos secos y de la fruta seca.

Cuando el chocolate se halla cristalizado y encogido, vuelque con cuidado los moldes de silicona y caerán solos.

Mantener a temperatura ambiente.

¡Buen provecho!

HIGADOS DE RAPE


HIGADOS DE RAPE


Esta es una receta que vale la pena elaborarla. No solemos pensar en cocinar hígados de rape (para mí, el “pata negra” del mar) y sin embargo este plato es delicioso, delicado,  exquisito, para mi es una DELICATESEN, lo difícil es que tu pescadero te guarde uno grande, pero cuando lo probéis, os encantara.

Ingredientes
2 Hígados de rape
2 Cucharadas de aceite de oliva virgen extra
2 Cucharadas de vinagre de sidra
Sal
Pimienta negra recién molida

Elaboración
Limpiar los hígados de rape.

En una sartén, calentamos 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra, luego colocamos los hígados en la sartén y cocinamos durante 3 minutos por cada lado. Sacamos y ponemos en plato de servir.

Desglasamos en la sartén con el vinagre de sidra y 3 cucharadas de agua caliente, raspando el fondo con una espátula de madera para aflojar los jugos del hígado, salpimentamos y llevamos a ebullición.

Finalmente vertimos la salsa obtenida en los hígados de rape, y disfrutar de este delicioso manjar.

Acompañar si se desea, con pasta fresca, arroz blanco o manzanas al vapor.

¡Buen provecho!

GUISO DE COL


GUISO DE COL



Entra el frio, pues a comer calentito, y después la siesta.

Ingredientes
500 gr de cerdo (preferiblemente pierna)
500 gr de tocino o panceta (media sal)
4 Chorizos
1 Col blanca
6 patatas
4 Zanahorias
2 Puerros
2 Cebollas
4 Nabos
1 Ramillete garni (tomillo, laurel y perejil)
Clavos de olor
Pimienta

Elaboración
Retiramos las primeras hojas de la col, cortamos la col en 4, y blanqueamos en agua hirviendo con sal.

Al final de la cocción, escurrimos y reservamos.

Pelamos las patatas, las zanahorias, los nabos y cortamos los puerros.

Sumergimos todas las carnes en agua hirviendo para blanquearlas, escurrimos.

Colocamos las carnes escaldadas en una olla con agua fría, ponemos a fuego medio y dejamos hervir 10 minutos, a continuación añadimos la cebolla con los clavos de olor clavados en ella, el ramillete garni y la pimienta.

Bajamos el fuego a lento y cocinamos  durante 1hora y 30 minutos.

Agregamos todas las verduras, menos las patatas, y seguimos cocinando a fuego lento 1 hora más.

Pasado este tiempo añadimos las patatas y cocinamos 30 minutos más.

Ya está listo nuestro guiso de col, calentito.

¡Buen provecho!

lunes, 14 de octubre de 2019

TARTA DE LIMÓN Y ALMENDRAS


TARTA DE LIMÓN Y ALMENDRAS


Hay varias recetas de tarta con limón en este blogs. Su especialidad es la presencia del polvo de almendras en la masa, que la hace diferente a las demás.

Ingredientes
3 Limones
150 gr de mantequilla + 15 gr para el molde
150 gr de azúcar moreno
4 Huevos
200 gr de harina
50 g de polvo de almendra (harian de almendra)
1 Bolsita de levadura en polvo.

Elaboración
Precalentamos el horno a 180º.

Lavamos y rallamos los 3 limones y sacamos el jugo a 2 de ellos. Reservamos todo.

En un bol vertimos la ralladura de limón con el azúcar, mezclamos bien, añadimos la mantequilla en pomada y batimos vigorosamente con una varilla, la mezcla debe quedar espumosa. Luego añadimos los huevos, de uno en uno, mientras seguimos batiendo.

Agregamos la harina tamizada sin  dejar de batir, el polvo de almendra o harina de almendra el sobrecito de levadura en polvo, seguimos batiendo y por ultimo agregamos el jugo de los 2 limones, sin dejar de batir.

Vertimos esta mezcla en un molde rectangular de 26 centímetros, bien enmantequillado y metemos en el horno. Dejamos cocer durante 15 minutos a 180º y luego durante 30 minutos a 150º. Al final de este tiempo, comprobamos con una aguja o brocheta para ver si el pastel está bien cocido.


Sacamos del horno, y dejamos enfriar. Una vez frio, desmoldamos.

¡Buen provecho!

TERNERA CON CEBOLLA


TERNERA CON CEBOLLA



Esta receta, es la primera asiática que elaboro. A menudo tomamos ternera encebollada, pero quería hacer una receta casera y no la de los restaurantes asiáticos. Al no tener wök, use mi sartén gitana, que es lo más parecido a un wök.

Ingredientes
250 gr de ternera cortada en filetes finos y estos a la vez en cuadrados o tiras
1 Diente de ajo
2 Cebollas medianas
1 ½ Cucharadita de maicena
1 Cucharada de vinagre de arroz
1 Cuchara de aceite de sésamo
2 Cucharadas de salsa de soja
1 Cucharadita de azúcar glas
1 Cucharadita de jengibre en polvo
2 Cucharadas de aceite de oliva virgen extra
Sal
Pimienta negra recién molida

Elaboración
En un bol, mezclamos la maicena con 12 cl de agua fría, añadimos el vinagre  de arroz, el aceite de sésamo, la salsa de soja, el azúcar y el jengibre. Mezclamos bien. Marinamos la carne de ternera en esta salsa durante 2 horas dentro del frigorífico, removiendo de vez en cuando.

Calentamos el aceite de oliva virgen extra en el wök y salteamos las rodajas de carne a fuego alto. Sacamos y reservamos.

Pelamos y cortamos las cebollas. A fuego medio, salteamos en el wök, hasta que estén tiernas, añadimos el diente de ajo pelado y machacado, luego volvemos a poner la ternera y la salsa del marinado. Removemos bien y servimos caliente.

Espero que os salga también como a mí.

¡Buen provecho!

TERRINA DE HIGADO DE POLLO


TERRINA DE HIGADO DE POLLO


Ingredientes
3 Chalotas
300 gr de lomo de cerdo
500 gr de hígado de cerdo
150 gr de pavo
½ manojo de perejil
2 Huevos
Sal
Pimienta negra recién molida

Elaboración
Precalentamos el horno a 180º.

Pelamos y cortamos las chalotas.

Cortamos el lomo de cerdo en tiras.

Cocemos el hígado de pollo en agua con sal y una hoja de laurel, una vez cocidos, escurrimos bien de agua, y pasamos por la trituradora.

Cortamos el pavo en dados.

En un bol mezclamos el hígado de pollo cocido y triturado con trozos de pavo, perejil, huevos, sal y pimienta negra recién molida, mezclamos bien para integra todos los ingredientes.

Añadimos las chalotas picadas, y las tiras de lomo de cerdo. Mezclamos bien.

Vertimos en el molde de plumcake, bien enmantequillado por todos lados. Yo use uno de aluminio de cocina (comprado en el supermercado)

Metemos en el horno y cocinamos durante una hora al baño maría.

Una vez en su punto, lo sacamos, dejamos enfriar y desmoldamos.

Listo para servir en lonchas.

¡Buen provecho!